LOS ÁNGELES-- Los ánimos estaban calmados tras la victoria ante Utah Jazz del viernes. Buena prueba de ello fue la buena cara con la que Kobe Bryant y Steve Nash recibieron el regalo de la Federación Italiana de Baloncesto.

Giancarlo Migliola, representante de comunicación de la federación, acompañado por Dino Meneghin y el presidente Giovanni Petrucci regalaron al buque insignia de los californianos una camiseta oficial de la selección italiana con el dorsal número ocho a la espalda, donde también se podía leer 'Kobe'. Nash también participó de la fiesta.

Bryant no dudó en retratarse con la nueva elástica y no escondió su lado más 'azzurro', comentando su satisfacción en perfecto italiano.

"Un saludos a todos, gracias por la 'Maglia Azzurra' (la playera azul) que me han regalado y recomiendo. ¡'Forza Italia'!, el grito de ánimo más utilizado en el país europeo se pudo oír en la salida del vestuario de los Lakers.

Según publica la web oficial de la Federación Italiana de Baloncesto, Bryant "dribló a la prensa estadounidense" para hablar con la comitiva e incluso pidió ser fotografiado con la elástica.

"¡Forza Italia!, un abrazo para todos ustedes", señaló el jugador del plantel californiano.

Kobe se mudó al país del 'prosciutto' y el Parmesano con seis años de edad, cuando su padre, Joe Bryant, comenzó a jugar en AMG Sebastiani Rieti, el Standa Reggio Calabria, Olimpia Pistoia y Reggiana. Allí residió hasta 1991, cuando con 17 años de edad regresó a EEUU.

Su paso por el país le dio un perfecto conocimiento de la lengua y también aprendió algo de español. Allí creció su afición por el fútbol, declarándose fan de A.C. Milán y Ronaldinho. Bryant incluso confesó en alguna ocasión que de haberse quedado en Italia, habría probado suerte como jugador profesional de fútbol.