Dwight HowardLayne Murdoch Jr./NBAE/Getty ImagesDwight Howard tan solo anotó seis puntos en la derrota de Lakers sobre Oklahoma City
LOS ÁNGELES-- Se cumplió la máxima de que Oklahoma City Thunder se muestra imparable en su feudo. Los locales no dieron opción a Los Angeles Lakers, que jugaron con Kobe Bryant (30 puntos en 39 minutos) lesionado desde el periodo inicial por culpa de una contusión en el nervio cubital de su brazo derecho. Los laguneros sólo pudieron contrarrestar el auténtico vendaval al que les sometieron los Thunder en la segunda mitad, cuando se repusieron a 18 puntos en contra, pero no lograron sobrepasar los seis y acabaron cayendo de 17 (122-105).

Oklahoma salió muy conectado desde el primer segundo de juego, tras comenzar con un parcial de 9-2, logró pulverizar sus registros anotadores de esta temporada llegando a los 71 puntos en el primer tiempo (37 puntos en el primer cuarto y 34 en el segundo), la marca más alta del equipo en lo que va de año.

La gesta de los Lakers parecía una utopía, pero el ímpetu de Bryant y Steve Nash (20 puntos y cuatro asistencias) mantuvieron viva la llama de la esperanza tras completar un gran tercer cuarto en el que recuperaron 18 puntos. Pero la presencia de Russell Westbrook (37 puntos y 10 rebotes) y Kevin Durant (26 puntos y nueve rebotes) puso coherencia al encuentro. Entre los dos anotaron más del 50 por ciento de los puntos de su equipo y desplegaron su mejor básquetbol para rematar a unos Lakers a la deriva durante la mayor parte del encuentro. Entre los dos anotaron 73 puntos.

La pérdidas de balón de los Lakers fueron un lastre demasiado difícil de superar. Mostraron carencias en este apartado desde el primer periodo, cuando alcanzaron los seis esféricos perdidos. La segunda mitad fue menos escandalosa y vieron reducidas su pérdidas, aunque al final concedieron 22 puntos en 16 pérdidas, mientras que en Thunder tan solo registraron dos balones perdidos.

Los laguneros se vieron en dificultades para defender la velocidad de los contraataques de Oklahoma, que anotó 22 puntos rápidos por 6 de los visitantes. Durant y compañía superaron la media de 17 puntos rápidos por juego que llevaban esta campaña. El dominio de los Thunder también se hizo efectivo en la pintura con una diferencia abismal: 52-22.

El buen registro de Oklahoma en su feudo es incuestionable, y es que ya acumulan un balance de 27-4 en una temporada en la que le han ganado la serie a los Lakers, que llevan sin vencer en Chesacake Energy Arena desde hace seis partidos, en los se incluyen los tres que perdieron en la serie de playoffs de la temporada pasada.

Si hubo algo que mantuvo a los Lakers pegados al resultado, eso fue el buen balance en los lanzamientos de tres puntos. Todos menos Dwight Howard fueron capaces de anotar desde más allá del aro, Metta World Peace y Bryant lograron tres triples por cabeza.

Serge Ibaka (13 puntos y seis rebotes) pudo jugar a pesar del manotazo que le propinó a Blake Griffin el pasado domingo y, aunque recibió una sanción económica de 25.000 dólares, nadie pudo evitar que se convirtiera en uno de los dolores de cabeza de los Lakers.

Oklahoma se encuentra inmerso en una gran racha tras vencer cinco de sus últimos seis encuentros y ocupan la segunda plaza de la Conferencia Oeste con un registro de 44-16. Los Lakers no lograron superar el .500 por primera vez desde noviembre y registran 30-31 en la novena plaza. Se encuentran a dos encuentros de Utah Jazz.