LOS ÁNGELES -- Estos Juegos Panamericanos serán recordados por la gran actuación de la delegación mexicana, su récord en medallas de oro queda en los libros (42 de oro, 41 de plata y 50 de bronce) y las historias de sus atletas ya fueron relatadas por todos los medios mexicanos y extranjeros que cubrieron la justa continental.

Los recuerdos que nos dejan las batallas que cada uno de los atletas aztecas dieron fueron épicas, unas con mayor proporción que otras pero igual de significativas para una nación urgida de alegrías.

Y son muchas las pinturas que se plasmaron en la competencia como el recuerdo del juegazo que dieron Bibiana Candelas y Mayra García por el oro en Volibol de playa ante las número uno del mundo, las brasileñas Juliana Silva y Larissa Franca, fue digna de una película de Hollywood.

También el básquetbol varonil peleó hasta la última jugada la presea dorada, pero se quedó corto y tuvo que conformarse con la plata, que por cierto fue un gran logro, pues ese equipo no estaba confirmado para participar hace un mes, por lo que se acrecenta lo hecho en la duela tapatía.

Y quién no recuerda a la primera reina de los Panamericanos, Cynthia Valdez, quien lesionada de un tobillo logró 5 gloriosas medallas para México. Y luego debutó de forma exitosa como comentarista en nuestra cadena y con ESPN desmenuzó la gimnasia panamericana de igual forma que dominó las pruebas en las que participó.

No se olviden de la otra reina, Paola Longoria, una chica de 23 años, pero que dominó el squash en Guadalajara y en total consiguió tres medallas de oro, demostrando que somos potencia en esta disciplina, lo malo es que no es olímpica.

Calvados también dio muchas alegrías y se notó que el equipo está listo para participar en Londres 2012. En total se ganaron ocho medallas de oro, en las ocho competencias que se programaron.

En atletismo retomamos en algunos deportes el nivel, pero seguimos lejos de aquellas glorias del pasado en el tartán.

El taekwondo me deja preocupado, porque en Beijing 2008 fue lo que nos dio gran satisfacción, ahora no veo el mismo nivel, pero falta tiempo y los Juegos Olímpicos se puede ver otra cosa.

En fin, puedo seguir recordando estas dos semanas día a día, si fuera necesario y tuviera el espacio para hacerlo, pero lo más importante fue que vimos unos juegos limpios (sólo un doping, hasta ahora), instalaciones en perfecto estado (salvo la repartición de las entradas, lo que sí fue un problema) y los aficionados se portaron a la altura, apoyando a sus países en todo momento y coreando los nombres de sus héroes.

Demos paso pues al siguiente capítulo, cada atleta regresa a sus lugares de origen a continuar su larga preparación rumbo a Londres 2012, un camino lleno de dificultades, lesiones, sacrificios, alegrías, pero sobre todo ilusiones.

Dejémoslos tranquilos ahora, que ya cumplieron, pues en menos de un año se verán las caras de nuevo en una justa que alberga a lo mejor del deporte mundial.