ESPN Los Angeles
Rigo Cervantez 12y

Gutiérrez aún no lo puede creer

LOS ÁNGELES -- "Todavía no me la puedo creer, es algo increíble," fue la primera respuesta de Mario Gutiérrez, el jinete veracruzano cuyo nombre le dio la vuelta al mundo luego de ganar el pasado fin de semana, el Kentucky Derby, a su arribo al sur de California, procedente de Kentucky, entrevistado por ESPNDeportesLosAngeles.com.

"Ha sido algo inolvidable, la he pasado, de verdad, muy bien," agregó Gutiérrez, quien en el lomo del tresañero I'll Have Another, ganó la edición 138 del Kentucky Derby, superando en la recta final al favorito Bodemeister.

Y con la primera joya de la hípica en las alforjas, ahora al mexicano no hay quien lo baje de la nube:

"Por ahora, sólo pienso en la siguiente carrera, en el Preakness y en ganar la Triple Corona," dijo, lleno de seguridad, confiado en las virtudes de su potro.

Aunque, por otra parte, trata de no perder piso, pues no se olvida de quienes lo han apoyado en su carrera.

"Estoy muy agradecido por esta oportunidad que se me presentó y la aproveché, porque también hice mi parte para que pudiera pasar. Aunque no imginaba que sucediera tan pronto," reconoce, y agrega:

"Tengo que darle gracias a mi familia, a mis amigos y todos los que me apoyaron."

¿Lloraste?

"Después de que pasé la meta, ya de regreso, me ganó el sentimiento, por todo el esfuerzo que uno viene realizando durante años, y todo te pasa en dos minutos, lo que dura la carrera. Ahí está el fruto de toda tu vida y, sí, se me rodaron las lágrimas."

Es que, también, lo invadió la nostalgia.

"Me acordé mucho de mi familia, que la extraño mucho. Ellos están en México y todas las emociones se me juntaron."

Pero luego de su triunfo, ya se comunicó hasta El Higo, Veracruz, y habló con sus padres, sus hermanos y con los cuates...

¿Te vas a festejar a México?

"No sé cuando, todavía. Porque, por ahora, tengo que volver a correr en menos de dos semanas. Aquí está mi trabajo y la familia lo entiende y me apoyan mucho."

Luego, Mario hizo referencia a la estrategia que le dió un dramático triunfo, viniendo desde atrás, para pasar y superar a Bodemeister, lo mismo que la arremetida final de un Dullahan que termina tercero.

"Fue algo que planificamos con el entrenador Doug O'Neill y todo nos salió de acuerdo al plan y los frutos se dieron, gracias al caballo, más que nada, porque corrió excelentemente."

Me habías dicho que tu estrategia como jinete es reservar un poco de la energía para el final. ¿Fué lo que hiciste?

"Claro que sí. Porque el final es lo que cuenta yo sabía que los últimos cien o doscientos metros eran los más importantes de la carrera y tenía que reservar mi caballo para que me aguantara toda la carrera. Gracias Dios todo salió como lo planeamos y por eso hoy sigo sin creermelo."

¿No te han invitado a Los Pinos, con el presidente?

"No. al que conocí, fue al gobernador de Kentucky, lo saludé, compartí con él y fue quien me entregó la corona de rosas."

Y luego de ganar las rosas del Kentucky Derby, Mario Gutiérrez ya tiene entre ceja y ceja el Preakness y el Belmont Stakes.

En busca de un hazaña, junto a I'll Have Another, que Affirmed produjo por última vez, un caballo que logró ganar las tres carreras, en 1978.

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