ESPN Los Angeles
Rigo Cervantez 11y

Mario Gutiérrez intentará sorprender

LOS ÁNGLES -- El jinete veracruzano Mario Gutiérrez, en el sillín de 'I'll Have Another', logró un estatus de celebridad casi instantáneo, al ganar este año dos de las joyas de la Triple Corona, el Kentucky Derby y el Preakness, quedándose a un paso de la inmortalidad, debido al retiro por lesión de su corcel en Belmont.

Y mientras 'I'll Have Another' se gana la vida 'trabajando' como semental en un afamado establo japonés, Mario vuelve a las andadas, y amenaza con estropearles la fiesta a los favoritos del Clásico Breaders Cup que se disputa durante el fin de semana en el Hipódromo de Santa Anita, en Arcadia, California.

"Nosotros vamos a tratar de robarnos el show", advierte Gutiérrez en entrevista con ESPNDeportesLosAngeles.com en Santa Anita, al referirse al caballo que montará este sábado, 'Handsome Mike,' de la cuadra de Doug O'Neill, marcado en las apuestas con momios de 30-1, muy distante de los grandes favoritos 'Come on Dude' (9-5), 'Flat Out' (5-1) y de 'Ron The Greek' (6-1).

"Cierto, no somos los favoritos, y los ojos de todos no están sobre nosotros, pero eso es algo que yo puedo aprovechar para darles una sorpresita, por qué no", agrega el jinete mexicano, quien confiesa que es la primera vez que monta en la Breaders Cup sin inmutarse por tener las apuestas en contra.

"Gané el Santa Anita Derby con apuestas en contra 43 por 1, en la segunda carrera estaba como 10-1. En el Kentucky Derby estaba como al 15 por 1, en Maryland estaba como 4-2 y para el Belmont estaba de favoritazo", recordó con una amplia sonrisa.

Ahora junto a 'Handsome Mike,' Mario intenta volver a hacer historia, aunque reconoce los obstáculos que enfrenta.

"Breaders Cup es un evento más internacional, considerada entre las mejores carreras del año con caballos que vienen de todas partes del mundo. Por ello no te puedo decir mucho de los demás caballos, porque no los conozco muy bien," confiesa.

Sin embargo, todas las dificultades que encara en esta carrera, que ofrece una bolsa de 5 millones de dólares, estimulan la sed de triunfo del muñeco de seda mexicano.

"Por carreras como esta, es que vale la pena lo que uno hace, y poder demostrar las habilidades en un evento de esta magnitud, sería otro gran momento para mí en este año, en el que me han pasado las cosas más bonitas de mi vida", destaca el oriundo de El Higo, Veracruz, que pretende seguir haciendo historia y dándole más lustre a su nombre y a su país de origen.

"No me conformo con haber ganado algunas carreras importantes. Como buen mexicano, quiero seguir poniendo el nombre de mi país muy en alto y para ello voy a darlo todo, más del cien por ciento como siempre en esta carrera", señala un ambicioso jinete.

Para el Clásico Breaders Cup a Mario y a su cuadrúpedo les corresponde partir desde la puerta siete, algo que no desagrada al jarocho.

"Me parece bien porque el caballo es muy diferente, tiene mucha velocidad y va a partir para colocarse de inmediato en las primeras posiciones porque a él le gusta así. Tiene una actitud muy buena. Me gusta el carril número siete, afuera del riel, porque si el caballo decide no ir para el frente, aún me quedaría tiempo sin otros caballos que me obstruyan para hacer mi trabajo", describió Gutiérrez.

UNA CALLE CON SU NOMBRE

Sobre lo que ha sido de su vida, luego de ganar en Churchill Downs y en Baltimore, Mario refiere que ha estado de vacaciones en Vancouver y ganando algunas carreras importantes en el hipódromo local.

Al mismo tiempo, en su población natal, de unos 20 mil habitantes, El Higo en el estado de Veracruz ya hay una calle que lleva su nombre.

Además, ha sido nombrado como el padrino de una generación de la escuela secundaria en la que estudió en su pueblo.

"Mi vida cambió totalmente y tengo que agradecerle a 'I'll Have Another,' que me colocó en lo más alto de mi deporte, me dio los triunfos, permitió que la gente me conociera en todas partes e hizo todos mis sueños realidad", dice un agradecido Mario Gutiérrez, quien también evoca los momentos por los que pasó al enterarse que perdía la oportunidad de ganar la Triple Corona en Belmont con el retiro de 'I'll Have Another'.

"Fue bien triste, porque teníamos todo el apoyo, éramos los favoritos y estábamos listos para hacer historia", recuerda, pero se muestra más que decido a volver intentar la conquista de la elusiva Triple Corona.

"Hay que seguir trabajando muy fuerte y, con un poco de suerte, encontrar otro caballo para volver a la cima", concluye Mario Gutiérrez, quien, mientras tanto, intentará cerrar un año de fantasía con otra victoria en contra de los pronósticos, esta vez, en el Clásico de Breaders Cup.

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