LOS ÁNGELES -- Los Angeles Lakers siguen abonados a vencer con altas dosis de sufrimiento. Los laguneros superaron a Charlotte Bobcats, el peor plantel de la liga, por un apretado 100-93.
Tardaron en despertar los oro y púrpura, que tras ir perdiendo de 20 puntos a cinco minutos para el final del tercer periodo, lograron sobreponerse al resultado gracias a un Jodie Meeks (14 puntos) espléndido desde más allá del arco, donde alcanzó un balance de 4-4 y 5-7 en tiros de campo para gestar la remontada.
Earl Clark (17 puntos y 10 rebotes) volvió a erigirse como uno de los protagonistas gracias a su polivalencia y energía sobre la cancha. Volvió a ser el eje del equipo, que encontró en Antawn Jamison (nueve puntos y cinco rebotes) a otro baluarte salido desde la banca.
El partido brindó dos mitades completamente diferentes. Mientras que en la primera Charlotte no encontró más que facilidades para aprovecharse de la débil defensa y poca capacidad anotadora de los laguneros; en la segunda, los Lakers le dieron la vuelta a la situación con mayor acierto y solidez defensiva.
La imagen que mostraron los laguneros en la primera mitad fue para el olvido en varios sentidos. Kobe Bryant (20 puntos y ocho asistencias) realizó una de las mitades más flojas que se le recuerdan. No fue capaz de anotar ninguna sola canasta en 18 minutos y tan solo lo intentó en dos ocasiones. La última vez que Bryant no anotó ninguna canasta fue el 31 de marzo del 2012, en su enfrentamiento ante Nueva Orleans Hornets. La Mamba Negra volteó la situación en el último periodo, cuando anotó 14 puntos y contribuyó a la victoria final.
Los Lakers salieron en el primer cuarto con una falta de energía preocupante, no hubo entendimiento y apenas podían hilvanar jugadas de ataque, mientras que en defensa volvieron a mostrar lagunas similares a las mostradas ante Boston Celtics.
El resultado de tan mal comienzo no hizo más que brindar concesiones a los Bobcats: pérdidas de balón (11 en la primera mitad, 13 en total), regalos en la pintura, fríos en los lanzamientos tanto de dos como de tres, donde el promedio fue desastroso.
No fue hasta el último tramo del tercer cuarto, con Dwight Howard (12 puntos, 11 rebotes) sentado tras llegar a las cuatro faltas personales, cuando los californianos despertaron y se armaron de efectividad para llevarse su cuarta victoria de la gira de los Grammy. El centro jugó su segundo encuentro tras ser baja por lesión debido a una lesión en su hombro derecho y mostró una buena imagen en el aspecto defensivo.
Los laguneros visitarán Miami para medirse a los Heat el domingo en horario matinal.