<
>

¿Encajarán las piezas en Dodgers?

Los Dodgers tienen grandes figuras, pero eso no garantiza la química del equipo Stephen Dunn/Getty Images

LOS ÁNGELES -- Los nuevos dueños de los Dodgers han gastado más de $600 millones en la adquisición de jugadores desde que compraron el equipo hace menos de un año. Ellos entrarán en la temporada 2013 con la nómina más alta, de más de $220 millones, en la historia del béisbol.

Ahora, la única pregunta es si pueden convertir ese dinero en victorias.

Echemos un vistazo a algunos de los problemas que enfrentan los Dodgers al entrar en una temporada llena de promesas, pero como siempre, llena de peligros. ¿Cuáles son los costos- y cuáles son las oportunidades- inherentes a una apuesta de alto riesgo?

A continuación: ¿Pueden los Dodgers hacer que un grupo de ex Todos Estrellas jueguen juntos?

Vamos a comenzar esta discusión con una cita de un ejecutivo anónimo de la Liga Nacional, arrancado de columna de Jayson Stark del ranking de las seis divisiones (ranking of all six divisions) (El Oeste de la Nacional terminó en cuarto lugar):

"Los Dodgers tienen más talento y los mejores currículums, pero también existe mucho potencial para la disfuncionalidad allí. Le doy el crédito a los Yankees por todos esos años en los que tenían una plantilla de súper estrellas, porque fueron capaces de funcionar como un equipo. Y que fue a causa de liderazgo de: [Derek] Jeter, [Mariano] Rivera, [Jorge] Posada, [Andy] Pettitte, Bernie [Williams].

"Cualquier cosa que se pueda pensar de [Josh] Beckett, Carl Crawford, Hanley [Ramirez], Adrian [Gonzalez] and [Zack] Greinke– ellos no son, Posada, Rivera, Pettitte ni Bernie. Así que tendremos que ver si van a convertirse en los Lakers o en la dinastía de los Yankees. Va a ser interesante".

Cuando hablé con Don Mattingly el mes pasado, me di cuenta de que la posibilidad de disfunción ocupaba mucho de sus pensamientos acerca de su equipo al entrar en la primavera. Habló largo y tendido sobre la necesidad de construir un sentido de equipo diciendo: "Realmente creo que hay algo que tiene un grupo de chicos que se llevan bien y quieren jugar el uno para el otro".

La disfunción podría venir desde muchas áreas. Las mejores piezas no necesariamente se convierten en un Ferrari. La ofensiva de los Dodgers tiene el potencial para estar entre las mejores de la liga, pero si los bateadores que están en el medio de la alineación insisten en ser el héroe, haciendo el swing para tratar de llevarse la verja en cada turno al bate, solo funcionará esporádicamente. Los Dodgers tienen un combinación de doble jugada que apenas ha trabajado en conjunto y un campocorto que parece poco consistente, por decirlo amablemente. La defensa en los jardines está también bajo cuestionamiento ya que Carl Crawford viene de una cirugía del codo.

El pitcheo es más bien un esfuerzo individual, pero ni Zack Greinke ni Ryu Hyun-Jin nunca han trabajado con ninguno de los receptores de los Dodgers y Josh Beckett le ha lanzado a A.J. Ellis solo un puñado de veces.

Y, por supuesto, siempre existe la posibilidad de que el club se divida. Eso no necesariamente significa que el equipo no puede ganar si eso sucede, pero los jugadores que vienen de Boston pueden dar fe de que no es la incubadora ideal para la victoria. Ramírez, Beckett y Adrian Gonzalez han tenido todos conflictos de una manera u otra con las figuras de autoridad. Greinke tiene una reputación de indiferencia.

Al parecer, los candidatos más probables para llevar el liderazgo son los jugadores de los Dodgers de mayor antigüedad: Matt Kemp y Clayton Kershaw. Con la eficacia en que ambos puedan establecerse como líderes- ya que algunos veteranos de mucho tiempo no van a escuchar a los jugadores más jóvenes- podría determinarse qué tipo de química se desarrollará. ¿Será tóxica, solo un poco inerte o -idealmente- creativa?

Si el talento juega bien en conjunto, sus relaciones entre ellos no importarán tanto. Tener un comienzo ganador aliviará la presión sobre los individuos y dará lugar para un mejor ambiente de trabajo. El ganar engendra ganar . Es en los puntos de presión de la temporada en la que veremos cuán cohesiva esta unidad resulta ser.

En este momento, esa es la pregunta seria en la mente de muchas personas.