ANAHEIM -- El jardinero dominicano Vladimir Guerrero, quien no juega en Grandes Ligas desde el 2011, firmó un contrato de un día con los Angelinos de Los Ángeles para retirarse oficialmente del béisbol con esa camiseta, informó el club el lunes antes de la apertura de la temporada del 2014.
Arturo Moreno, propietario del conjunto de la Liga Americana, y Guerrero, quien jugó con los Angelinos del 2004 al 2008, firmaron un contrato simbólico en medio del terreno, durante las festividades de la noche inaugural en Angel Stadium.
Guerrero realizó lanzamiento ceremonial de la primera bola antes del partido contra los Marineros de Seattle.
"Significa mucho para mí. Jugué seis años aquí y fuimos a los playoffs cinco veces", dijo Guerrero a ESPNdeportes.com. "Me sentí muy contento cuando me llamaron para decirme que lanzaría la primera bola en el primer juego en Anaheim", agregó Guerrero, quien estaba acompañado por sus padres, Altagracia y Damían.
Guerrero, quien bateó .318 con 449 jonrones y 1,496 carreras impulsadas en 16 temporadas en Grandes Ligas, es un fuerte candidato para ingresar al Salón de la Fama de Cooperstown cuando sea elegible en el 2017. Aunque jugó la mayor parte de su carrera en Montreal, el quisqueyano podría ser el primer representante de los Angelinos en el nicho de los inmortales.
Guerrero, un nueve veces Todos Estrellas, también jugó con Vigilantes de Texas y Orioles de Baltimore. Tuvo los mejores números de su carrera en Montreal (.323, 234 jonrones, 702 impulsadas y 123 robos en ocho años), pero con los Angelinos conquistó el Jugador Más Valioso de la Americana en el 2004 y asistió a la postemporda en cinco de seis temporadas.
"Ahora mismo no estoy pensando en eso. Espero tener salud para esperar ese día y que ocurra lo que tenga que ocurrir", dijo Guerrero sobre sus posibilidades de llegar al Salón de la Fama. Juan Marichal es el único dominicano en Cooperstown y Pedro Martínez será elegible en el 2015.
Guerrero, de 39 años, dijo que aún no se siente como un jugador retirado y que rutinariamente participar en partidos de softból en su pueblo natal, en el sur de República Dominicana. También se mostró muy entusiasmado con la posibilidad de que su hijo de 15 años pronto le seguirá los pasos en el béisbol profesional.
Vladimir Guerrero hijo mide 6-1 y pesa 200 libras. Al igual que su padre, se divierte pegando batazos descomunales y se espera que sea uno de los jugadores más cotizados del mercado internacional en julio del 2015, cuando será elegible para firmar al profesionalismo.
"Me siento bien trabajando con mi hijo. La gente dice que es un gran prospecto", dijo Guerrero.