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Serafines extienden racha irregular

ANAHEIM -- Tras terminar de la mejor manera la primera mitad, Angelinos de Los Ángeles están atravesando un comienzo complicado después de parar por el Juego de Estrellas.

Los dirigidos por Mike Scioscia han perdido cuatro de seis en la segunda parte, tras caer por 6-4 ante los Tigres de Detroit el jueves por la noche.

Ni siquiera Garrett Richards (11-3), su mejor serpentinero en 2014, fue capaz de apagar los bates visitantes, que mostraron suficiente pirotecnia para dejarlo en evidencia.

"Algunas cosas lo alcanzaron", dijo el timonel. "Su dominio no fue tan bueno, aunque su velocidad y movimiento fueron increíbles. Puso algunos pitcheos en algunas zonas que los rivales alcanzaron. Pasó por el centro de su orden y lo conectaron. Falló en algunos lugares y ellos tienen buenos bateadores y no fallaron".

Todos, a excepción del receptor Alex Ávila, lograron al menos un inatrapable, y esa consistencia ofensiva, en unísono con la producción circunstancial de los Miguel Cabrera, Torii Hunter y Víctor Martínez fue la diferencia.

"Garrett se libró de algunos problemas y nos mantuvo a una carrera, pero el sexto inning fue difícil y se topó contra algunos bates", dijo el timonel.

Los Angelinos lograron voltearle el partido en la quinta entrada a Max Scherzer (12-3), que finalmente se salió con la suya tras otra noche inspirada.

"Creo que ofensivamente contra Scherzer hicimos un buen trabajo", opinó Scioscia. "Creo que ponchó a 11 pero ejecutamos bien. Kole [Calhoun] consiguió un buen hit para darnos la ventaja y tuvimos otras oportunidades".

El actual Cy Young de la Liga Americana se mantuvo firme para completar 7.0 innings, ponchando a dos en su último episodio.

"Su material mejora con el correr del juego y es de esos pitchers a los que quieres batear al comienzo", dijo el mánager local. "Nosotros lo hicimos por la mitad pero no nos alcanzó. Tuvimos una ventaja y no pudimos mantenerla".

Sin embargo, Scioscia quiso poner paños fríos a la situación. La ofensiva parece menos calibrada que en la primera mitad de temporada, e incluso el bullpen está viendo algunos cortocircuitos menores, pero su cautela está justificada.

"Estamos hablando de siete partidos", recalcó. "Hubo rachas de siete partidos en la primera mitad en la que no estábamos funcionando en plenitud. Creo que hicimos un mejor trabajo, le pegamos duro a la bola, movimos corredores y bateamos con gente en base. Conseguimos cuatro carreras y solo no estuvimos en el lado correcto del resultado. Es un monto muy pequeño de partidos como para empezar a hacer cambios".