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Pau evoluciona, Lakers se estancan

LOS ÁNGELES -- Cuánto ha cambiado la situación de Pau Gasol desde que se marchó de Los Ángeles Lakers y qué similar es la de su ex equipo a la del último año que el ala-pívot militó en sus filas. La evolución del uno es el estancamiento de los otros. Y así pasan los días, las semanas y los meses; los partidos, las victorias y las derrotas. Pau vive su segunda juventud mientras los Lakers deambulan en el ocaso de una era que ya es historia; de unos tiempos dorados traducidos en dos anillos.

Los tres últimos años de Gasol en los Lakers fueron más tensos que placenteros y eso se tradujo en su juego, en su moral. Los rumores sobre su salida se convirtieron en una constante con la que el internacional español estuvo obligado a vivir. Fueron demasiadas las mañanas que desayunó con noticias que aseguraban su salida, que hablaban del interés de los Lakers en traspasarle.

El temor de una marcha abrupta, como la que vivió cuando Memphis Grizzlies le traspasó en febrero de 2008, fue algo demasiado común en sus últimos años en los Lakers. No sucedió, Pau contó con la oportunidad inédita de convertirse en agente libre el pasado verano y tomó la decisión de firmar con Chicago Bulls. Es allí donde el jugador se ha reencontrado consigo mismo.

"Sí, me he liberado. Por tener la seguridad y tranquilidad de estar en un equipo en el que sabes que no estás en la cuerda floja. Creo que es mucho más favorable y ayuda a tu rendimiento", aseguró a ESPNDeportes.com durante un acto de la Fundación Gasol Vida (fundación que comparte con su hermano Marc para ayudar al desarrollo de niños, niñas y sus familias) celebrado el miércoles en el Roosevelt High School del Este de Los Ángeles.

Esa liberación le está ayudando a completar actuaciones muy similares a las que protagonizó en los tiempos en los que logró dos anillos de campeón con los Lakers en 2009 y 2010. Acumula 28 dobles-dobles, el máximo de cualquier jugador de la liga esta temporada, y cuenta con un promedio de 18.3 ppj, 11.9 rpj y 2.3 apj.

"Estoy muy contento de estar viviendo la etapa que estoy viviendo. Las cosas están saliendo muy bien hasta el momento. Demuestra el acierto de mi decisión. Estoy con mucha energía, con muchas ganas. Es una etapa diferente y sabiendo que tengo un resto de carrera limitado, que quiero dar lo máximo de mí mismo y seguir siendo un jugador excepcional", afirmó.

Y así, en su mejor momento deportivo en años, Gasol regresa al que fue su hogar durante seis temporadas y media. El mar de sensaciones es inevitable y el cosquilleo que siente a escasas horas para el reencuentro ante su afición es parte de la previa de un partido con más sensaciones que competitividad, con unos Lakers a la deriva y unos Bulls que aspiran a llegar a lo más alto de la NBA.

"Tengo un cosquilleo, no ansiedad", confesó. "Ganas, ilusión de vivir ese momento, de ver a toda la gente que trabaja en el Staples y que he visto tantos años, saludarles, estar en el edificio donde he jugado tantos años con los Lakers. Muchas cosas pasan por mi cabeza, pero con ilusión, con nervios, con ganas de disfrutarlo y hacer un buen partido. De agradecer a los aficionados el apoyo de estos años", vaticinó.

SIN REENCUENTRO CON KOBE

El ex lagunero se encontrará con un equipo muy parecido al que dejó, con casi el triple de derrotas que de victorias (12-34), sin identidad, sin plantilla de garantías, sin casi opción a clasificarse para los playoffs y mermado por las lesiones. Y entre los descartados, un recién operado, Kobe Bryant, con el que mantiene una estrecha relación de amistad. El escolta fue intervenido quirúrgicamente el miércoles por la mañana y estará apartado de las duelas durante nueve meses.

"No hablé con él ayer u hoy. Hablé con él cuando me enteré de su lesión. No sé si estará en el estadio para el partido. Espero que se recupere rápido de la lesión. Es un luchador, así que seguirá adelante. Es una mala suerte que tenga otra lesión. Es muy duro para una persona tan competitiva como él y tan ganadora", aseguró antes del juego.

"Sin duda, hubiera sido especial. Pero las lesiones pasan, ocurren, siento que le hayan pasado con tanta frecuencia en estos tres años. Para cualquier jugador es duro, pero para uno como él que es tan competitivo y exigente, no debe ser nada fácil. Es una pena que no podamos jugar el uno contra el otro de momento, esperemos que el año que viene sí suceda", deseó.

Gasol regresará a la que fue su casa y la expectación será enorme, porque aunque haya sido foco de críticas y rumores, lo cierto es que siempre fue querido, y cuando su nombre sonaba los aplausos siempre fueron una mayoría absoluta.