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LOS ÁNGELES -- Restan 28 largos juegos para que finalice la temporada de los Los Ángeles Lakers (13-41) y la zozobra es cada vez más palpable en los jugadores y el cuerpo técnico del conjunto angelino. La derrota ante los Brooklyn Nets (22-31) por 114-105 en el primer partido de los californianos tras el receso por el All Star reflejó una imagen desoladora, otra más. El equipo tan solo ha sido capaz de sumar una victoria en los últimos 16 encuentros y la desazón está pasando factura. Los jugadores siguen incapacitados para mantener un ritmo constante durante los 48 minutos y los enfados de Byron Scott siguen siendo constantes. Buena prueba de ello fue la reprimenda que les dio a sus pupilos cuando después de una primera mitad en la que llegaron al descanso con un punto de ventaja, cayeron estrepitosamente (40-20) en el tercer periodo. "Hubo un tiempo muerto en el que les reté", afirmó Scott. Tuve que retarles y cuestionarles. No nos podemos permitir tener un cuarto en el que ellos despeguen, no podemos tener lapsos como estos. Debemos competir más duro contra equipos con los que tenemos la oportunidad de ganar. Así de simple. Mi reto fue básicamente: '¿Debo insultarles para que jueguen duro y compitan durante 48 minutos?', confesó haberles dicho. Relativamente sereno ante los medios, casi acostumbrado a tener que justificar cada derrota ante la opinión pública, Scott no escondió -como nunca hace- las reprimendas a sus jugadores. Carlos Boozer no jugó un solo minuto porque, según el entrenador, quería reinsertar a Jordan Hill. "No creo que vuelva a repetir esto, porque obviamente no funcionó", apuntó. Scott reconoció que sabe a la perfección cuándo sus jugadores lo dejan todo sobre la duela y cuándo no. Su estado de ánimo varía mucho según sea la circunstancia. "Puedo saber cuándo los jugadores juegan duro o no, y no lo hicieron en el tercer cuarto. Puedo saber cuando el otro equipo está encendido. No podemos estar a la defensiva como hicimos en el tercer periodo. Si los contrarios van a competir y jugar duro, tú tienes que jugar igual o más. No lo hicimos", lamentó. Los Lakers se medirán el domingo a losBoston Celtics en el Staples Center. Se tratará de la reedición de una rivalidad venida a menos pero que Scott se suele tomar muy en serio por los enfrentamientos de épocas pasadas que a él le tocaron vivir. "Esperemos que el domingo jueguen como hicieron en el último cuarto de hoy", sentenció.
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