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Pujols tiene una noche especial

El abridor derecho de los Rays de Tampa Bay, Chris Archer, recetó 15 chocolates este martes en Anaheim, para contener a la candente ofensiva de los Angelinos de Los Ángeles y conducir a su equipo a un triunfo de 6-1, para igualar la serie a una victoria por bando.

Al único que no pudo dominar a plenitud, fue a Albert Pujols, quien se fue de 1-4 en la noche, logrando su sexto batazo de vuelta entera de la presente secuela de juegos en el Estadio de la A Gigante, con 11 carreras producidas en ese lapso.

El primera base de los Angels volvió llevarse la barda del jardín izquierdo, con las bases limpias, durante el cuarto capítulo, para sumar 534 en su carrera, algo que le permite llegar al lugar 17 de la historia, junto a Jimmie Foxx, quedando a 2 vuelacercas de Mickey Mantle.

“Fue algo muy especial. Nunca pensé cuando llegué a grandes ligas que lograría la cantidad de cuadrangulares que he alcanzado. Y me siento bendecido por haber recibido esta capacidad para jugar al beisbol, y de haber recibido esta fuerza, a pesar de que los últimos años han sido difíciles, debido a algunas lesiones. He pasado por situaciones complicadas, pero he sabido sobreponerme para ofrecer lo mejor a mis compañeros y a este equipo”, dijo el inicialista, después del juego.

Luego, recordó las primeras seis semanas de la temporada 2012, “que fueron muy duras, pero que me hicieron un pelotero más fuerte, en cuanto a mentalidad”, destacó, en lo que fuera su primera campaña como jugador de los Angelinos.

“Tengo que agradecer a todos dentro de esta organización, especialmente por la confianza que tuvo en mí el propietario del equipo, Arte Moreno, al traerme, pensado en que yo podía ayudar a este equipo a ganar. Es por ello, que el objetivo mayor que tengo con la institución, es el de lograr traer el trofeo de campeón de la Serie Mundial para Anaheim”, señaló.

Pujols aseguró que no ha hecho cambios, o nada especial, para lograr esta racha de batazos de alto poder, que ya lo convierten en el líder de la especialidad en el equipo, con 14, uno más que Mike Trout.

“Simplemente, he tenido mejor suerte con mis batazos. Si ves mis juegos pasados, notarás que he bateado la pelota bien duro. Y cuando uno hace eso en forma constante, llega el momento en que encuentras los hoyos para lograr tu objetivo. Uno tiene que mantenerse positivo, es algo que aprendí en los inicios de mi carrera, ya que la temporada es muy larga”, señaló, para luego insistir en que no le gusta destacar sus hazañas individuales.

“Yo no quiero enfocarme en mis logros, pues pienso siempre en el equipo. Hoy, tuvimos una derrota muy dura, sin embargo, espero que logremos darle vuelta a la página y mañana salir a ganar el juego, para llevarnos la serie”.

Después, reconoció que haber superado la marca del medio millar de bambinazos, sí es algo que atesora entre las conquistas de su ilustre carrera.

“Lo del año pasado, fue algo muy especial, llegar a los 500 cuadrangulares, es algo que ya nadie me puede quitar y si se pudiera, quisiera compartirlo con todos mis compañeros, rompiendo el bate y dándoles todos una pieza del mismo”.

También se dio tiempo para elogiar la buena labor del lanzador de Tampa, Chris Archer, quien lanzó pelota de 6 imparables, durante 8 entradas completas, permitiendo una sola carrera, sin conceder pasaportes y abanicando a 15.

“Dominar a bateadores de grandes ligas, ya sea por la vía del ponche, el elevado o con roletazos, hasta con una línea al campo corto, equivale a lo mismo. Yo solo me ocupo de salir a sumar entradas de calidad y ayudar al equipo a ganar y a darle un poco de descanso a los relevistas”, apuntó Archer, que dejó su marca en 6-4, con efectividad de 2.01.

“Todo se reduce al buen control de la recta, algo que he logrado ofrecer en mis más recientes juegos. Además, contamos con una defensa magnífica, por ello no me inquieta en lo más mínimo poner la pelota sobre el plato”, destacó el serpentinero, quien acumula 97 chocolates en la actual temporada, 27 en sus más recientes dos salidas.

La derrota quedó en manos del abridor de los Angelinos, C.J. Wilson (3-4, efectividad de 3.55), luego de su labor de 6 episodios, en los que aceptó solo 4 imparables, pero le hicieron 5 carreras. Ponchó a 7 y entregó 3 salvoconductos.