ESPN Los Angeles
Mark Saxon 9y

Con los ingredientes de un Clásico

LOS ANGELES - Recibir dos no hitter en menos de 10 días no es manera de entrar a la serie más importante de la temporada, pero los Dodgers de Los Ángeles han estado lanzando muy bien últimamente. Y cuando juegan contra los Gigantes de San Francisco, en realidad nadie espera mucho de acción en la caja de bateo.

El centro de atención es por lo general el montículo, particularmente cuando Clayton Kershaw, Zack Greinke y Madison Bumgarner están programados para lanzar.

"Vamos a estar listos", dijo el primera base de los Dodgers, Adrián González, minutos después de que el lanzador Jake Arrieta, de los Cachorros de Chicago, los dejará a él y sus compañeros sin hits en el "Sunday Night Baseball." Los Dodgers, extrañan la ofensiva de Yasiel Puig y Howie Kendrick, ambos en la lista de lesionados, y últimamente no están siendo una presencia amenazadora en la caja de bateo.

Mike Fiers, que nunca había lanzado nueve entradas, los dejó sin hit el 21 de agosto en Houston. Los Dodgers no anotaron una sola carrera en la última serie que Bumgarner apareció en su contra.

Pero los Gigantes, acosados por las lesiones, han sido blanqueados cuatro veces este mes y no han sido capaces de recuperar terreno en la carrera por el Oeste de la Nacional. Entran en el primer partido de esta noche, en una serie fundamental de tres partidos y con cuatro juegos más en la columna de derrotas. Esta es su única oportunidad de ponerse codo a codo hasta la última semana de septiembre.

"Gran Serie ", dijo Greinke.

Lo que lo hace particularmente interesante, aunque los bateadores en la serie podrían elegir una palabra diferente, es que cada uno de los lanzadores abridores de primera línea de ambos equipos es particularmente letal contra su rival. Bumgarner tiene balance de 13-5 con una efectividad de 2.34 en 19 partidos contra los Dodgers. Kershaw tiene 14-7 con una efectividad de 1.63 en 29 partidos contra los Gigantes. Greinke, el recién llegado, tiene marca de 6-0 con efectividad de 2.28 en ocho partidos vs. San Francisco.

Teniendo en cuenta esas cifras miserables, lo que sucedió la noche del domingo en el Dodger Stadium y el hecho de que los Dodgers dejaron a sus oponentes en dos carreras o menos, en todos menos en un juego de la semana pasada, uno esperaría que las carreras serán un premio en los próximos tres días. Por supuesto, el béisbol rara vez sigue el guion.

Si los bateadores van a dejar su huella en esta carrera por el título, esta noche es probablemente el momento para hacerlo, con Jake Peavy (4-6, 4.21 ERA) y Brett Anderson (8-8, 3.36 ERA) en el montículo. Por otra parte, Peavy tiene 7-1 con una efectividad de 2.83 en el Dodger Stadium. Él y Anderson pueden presumir de ser lanzadores de grandes partidos. Anderson, en silencio, ha tenido su más saludable e impresionante temporada desde su año de novato. Está en camino de lanzar 189 entradas, lo que sería un récord personal.

Anderson describió su salida de esta noche como la más grande desde los playoffs de 2012, cuando mantuvo a los Tigres de Detroit en dos hits y en balnco durante seis entradas a los Atléticos de Oakland.

"Todavía tenemos un poco de tiempo y tratas de pensar que es otra salida cualquiera, pero una vez allí sabes que no será así ", dijo Anderson. "Pero eso es una de las razones por las que firmé con los Dodgers, para lanzar en juegos como este. Estoy emocionado de estar sano en este momento y salir a tratar de demostrar por qué me firmaron también".

Los Gigantes no tendrían que ganar obligatoriamente el partido de esta noche, pero teniendo en cuenta ciertos datos deberían intentar conseguirlo. Kershaw y Greinke, que han lanzado consecutivamente en la rotación la mayor parte de la temporada, sólo han sido derrotados en juegos consecutivos una sola vez en el año. Los Astros de Houston lo lograron a principios de este mes. La vez anterior fue en agosto de 2014.

Kershaw está en su momento. En sus últimas 11 aperturas, tiene una efectividad de 0.95, 105 ponches y ocho bases por bolas. Greinke sigue encaminado a una temporada de ensueño. Lidera la Liga Nacional en efectividad (1.61), WHIP (0.85) y salidas de calidad (24).

Los Dodgers podrían sobrevivir fácilmente cualquier resultado, incluso una barrida de tres juegos, mientras que los Gigantes tienen que recuperar el terreno con sólo 32 partidos por jugar en la temporada. Han vencido a los Dodgers nueve veces en 12 partidos hasta el momento, una tendencia que probablemente tendrán que seguir para llegar a la postemporada. Los Dodgers tuvieron al principio problemas contra San Francisco la temporada pasada, pero dieron la vuelta al guion al final ganando siete de los últimos nueve partidos.

Estos equipos no necesitan los playoffs como un motivador para jugar duro entre ellos. Sus fans no necesitan septiembre para empacar e ir al estadio. Cuando todo se junta las cosas tienden a ser eléctricas en estas series.

"Cada vez que te enfrentas a los Gigantes, es un gran juego sólo por la rivalidad", dijo Anderson, "pero en este momento de la temporada significa un poco más".

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