BUENOS AIRES -- Independiente regresó hoy a los entrenamientos pensando en el encuentro del próximo domingo frente a San Lorenzo, con el silencio como único aliado y en medio de su peor momento tras el duro golpe que significó la derrota ante Belgrano de Córdoba.
El traspié ante el conjunto de Barrio Alberdi, que mantiene al rojo en la zona de descenso, minó aún más el muy difícil presente del equipo de Américo Gallego, que el domingo tendrá un encuentro clave ante San Lorenzo, un rival directo en la pelea por escaparle a la zona roja de los promedios.
El espeso clima que se respiró en Avellaneda luego de la derrota ante Belgrano se reflejó en la decisión del cuerpo técnico y los futbolistas de mantenerse en silencio.
Los jugadores que participaron del encuentro ante el Pirata realizaron trabajos regenerativos, en tanto que quienes no fueron parte del encuentro hicieron ejercicios tácticos y fútbol con integrantes de la reserva.
La buena noticia para Gallego es que el defensor paraguayo Claudio Morel Rodríguez está recuperado de una lesión muscular y podría reaparecer ante el Ciclón, en tanto que Luciano Leguizamón realizó fútbol por primera vez tras el desgarro, aunque deberá esperar al menos una semana más para estar a disposición del técnico.
El muy mal presente del rojo se traduce en su posición en el certamen, en el que marcha antepenúltimo, con apenas 15 puntos, producto de tres victorias, seis empates y siete derrotas.