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El fenómeno del tenis canadiense: ¿coincidencia o condiciones?

Eugenie Bouchard, la primera canadiense en jugar la final de un Grand Slam. Getty Images

TORONTO -- Vasek Pospisil tiene mucho que explicar en estos días. Cosas como, "¿qué es lo que está pasando con el tenis en Canadá?".

"Ya he respondido esta pregunta tantas veces", dijo Pospisil, de 24 años, que ya ha desarrollado una versión estándar de la respuesta, que comienza con: "En resumen, es una combinación de un par de cosas".

Eso le será muy útil, porque es una pregunta que probablemente seguirá escuchando muy a menudo.

Milos Raonic, el jugador mejor clasificado del país, ya ha notado el aumento de interés desde que se abrió paso en el Australian Open de 2011 y llegó a la cuarta ronda.

"Sí, creo que se seguirá hablando mucho del tema", dijo Raonic. "Cuando respondes las preguntas de la prensa, surge un poco más de la gente en general, se ven más canadienses. A veces, hasta se puede ver a una persona que no es canadiense con una bandera de Canadá en un partido".

Por más de un año, ha habido un aumento tranquilo pero constante en los jugadores con la hoja de arce junto a sus nombres. Pero fue en Wimbledon donde el país anunció en voz alta su llegada a la escena del tenis.

Eugenie Bouchard se convirtió en la primera canadiense en una final de Grand Slam, Raonic fue el primer canadiense en llegar a la semifinal masculina de Grand Slam, y Pospisil se unió al estadounidense, Jack Sock, en lograr el título de dobles masculino.

Anteriormente limitado a jugadores de dobles y un jugador ocasional dentro del top 100 masculino o femenino, la presencia de Canadá en los rankings de tenis ha aumentado de manera significativa. Además de participantes establecidos como el exjugador de dobles Nº1 Daniel Nestor, el joven de 23 años de edad, Raonic, y la de 20 años, Bouchard, ahora están dentro del top 10 y son los canadienses con los rankings más altos de todos los tiempos, y ambos son considerados candidatos emergentes de cara a ganar un Grand Slam.

Pospisil alcanzó el número 33 en el año 2013 antes de experimentar una lesión en la espalda esta temporada, y está empezando a recuperar su juego. Y hay más prospectos prometedores, como el sólido campeón junior del US Open 2013 y Wimbledon, Filip Peliwo, y la talentosa femenina juvenil, Francoise Abanda.

¿Coincidencia o condiciones? Pospisil lo ve como un poco de ambos.

"Obviamente, por más que mucha gente quisiera decir que no es una coincidencia, lo cierto es que también lo es", dijo. "Lo que ha logrado Tennis Canada es increíble... Sin ellos, esto no hubiese sucedido".

"Pero tampoco hubiese sido posible sin el talento y los propios individuos. Muchas cosas tienen que pasar para que a alguien le vaya bien en este deporte. Así que no es tan simple como cambiar un par de cosas en la federación".

Tennis Canada, la federación que dirige los eventos de la ATP y la WTA en el país y es responsable del desarrollo del juego en la nación, ha reestructurado su programa de entrenamiento en el año 2007, invirtiendo un extra de $1 millón por año y estableciendo un centro nacional en Montreal.

Raonic estuvo trabajando a tiempo completo en el centro como jugador junior, y tanto Pospisil como Bouchard han pasado períodos entrenando allí. Pero los tres también han tomado rutas diferentes en partes diferentes del país.

Raonic es un jugador nacido en Montenegro que se crió en Toronto, donde practicaba su famoso saque temprano por las mañanas antes de unirse al programa de Tennis Canada. Bouchard es de una familia acomodada de Montreal y fue a la academia de Nick Saviano en Florida a los 12 años para poder entrenarse durante todo el año. Pospisil, de Vancouver, se fue a la República Checa natal de sus padres entre las edades de 15 y 18 años, y a los 20 llegó al centro de Montreal.

Bouchard no ve una gran conexión.

"A algunos de nosotros nos ha ido bien en la misma época. Creo que es una feliz coincidencia. Por ejemplo, tanto yo como Milos y Vasek, lo hemos logrado de maneras completamente diferentes", dijo.

"Yo no señalaría un hecho común específico. Pero creo que es algo bueno. Es un buen timing. Creo que debido a eso, la popularidad del tenis ha crecido en Canadá".

Wimbledon de este año estableció récords de televisión en Canadá, con las dos finales como la más vistas de todos los tiempos en el país. La final de Bouchard contra Petra Kvitova fue vista por un promedio de 2.4 millones de personas, y la semifinal de Raonic atrajo a 776.000 personas. En total, 10 millones -- casi un tercio del país -- vieron alguna parte del torneo, según la emisora de deportes TSN, que emite la competencia en el país.

Pero las circunstancias también se han citado como una contribución a la reciente llegada de los canadienses en el circuito profesional. Lawn Tennis Association recientemente sumó al ex CEO de Tennis Canada, Michael Downey, como su nuevo director, lo que sugiere que habría una conexión.

Raonic habla bien de su experiencia en el programa nacional y dice que su éxito posterior inspirará confianza y buenos resultados de los demás.

"Hay un buen programa en marcha, pero creo que una gran parte del éxito masivo es que una persona se abra paso", dijo. "Si tienes que ir a entrenar, tienes que ir a correr, tienes que levantar pesas, tienes que jugar en la cancha, y ves que alguien ya está teniendo éxito con ese sistema lo inspirará para seguir adelante".

El aspecto más significativo, sin embargo, podría ser un mayor éxito del país en la toma de los jugadores de juniors o rangos inferiores para llevarlos a los niveles superiores. El aumento de la financiación y los recursos de la federación han ayudado a algunos jugadores para dar el siguiente paso.

Pospisil dice que el acceso a los entrenadores por medio de la financiación de la federación ha tenido un impacto enorme y apunta a Louis Borfiga, un francés que es el jefe de desarrollo de alto rendimiento en Tennis Canada, como una influencia central en todo este proceso.

"Sobre todo, creo que, cuando Louis Borfiga entró en escena, cuando Michael Downey lo contrató, estableció la plataforma y permitió que todo esto suceda", dijo Pospisil.

Pospisil le ha dado el crédito a su entrenador Frederic Fontang, con quien comenzó a trabajar en 2012, como una razón importante de su reciente auge. Raonic pasó del top 300 al top 20 con Galo Blanco antes de comenzar con Ivan Ljubicic hace un año.

"Las decisiones de preparación, los entrenadores que sumaron, hicieron una gran diferencia", dijo Pospisil. "Ahí es donde Borfiga tuvo un gran papel. Es un hombre muy inteligente. Él realmente sabe de tenis, no parece así si no lo conoces, pero él sabe bien qué es lo que está haciendo".

"Borfiga sabía que [Fontang] estaba disponible, y sabía que él era un buen entrenador, y dijo:" Oh, ese sería un buen entrenador para sumar a nuestro equipo'. Y así fue que hice una prueba con él, y, obviamente, fue genial. Así fue cómo conseguí el entrenador que tengo ahora, quien es muy bueno. Lo mismo ocurre con Milos, encontraron un gran entrenador para él en Galo Blanco.

"Creo que nos ayudaron a usar todo nuestro potencial y crecer".

Ahora, su propio éxito tiene el potencial de hacer lo mismo para el tenis en todo el país.