Gonzalo Aguirregomezcorta 10y

Mundial: Análisis del Grupo D

LOS ÁNGELES -- La última ocasión en la que la selección de baloncesto de México participó en un Campeonato del Mundo de Baloncesto de la FIBA, la calidad de las imágenes en la pantalla gigante era la que encontramos en las versiones originales de películas como "El Padrino II", "Chinatown" o "La Matanza de Texas". Las tonalidades sepia persiguen los recuerdos de un combinado nacional mexicano que desapareció del espectro internacional en aquel momento, hace ya 40 años. En 1974 nacieron varios clásicos del cine, aquel fue el año en que el básquetbol azteca dejó de respirar ante los ojos del mundo entero.


Cuatro décadas después, y tras el dominio de México en el Campeonato FIBA Américas 2013, la ilusión regresó para esta generación, liderada por Gustavo Ayón, que busca dar que hablar en una competición en la que no son favoritos, pero en la que desean demostrar que no todo es fútbol en el país norteamericano. Lo más importante ya está hecho: romper con el maleficio de 40 años de ostracismo a nivel internacional, ahora solo queda que el conjunto dirigido por el español Sergio Valdeolmillos sea capaz de disfrutar de su juego en un Grupo D harto complicado, pero en el que cuentan con posibilidades de pasar a la siguiente fase.

Gran Canaria será testigo de los avatares de la selección de México, quienes también se alzaron como vencedores en el Centrobasket durante su preparación mundialista. Su pugna será activa en aras a hacer un buen papel ante las favoritas, Eslovenia y Lituania; la rocosa Australia y la que sobre el papel luce como el equipo más parejo, Angola -- campeón del Afrobasket 2013 -- sin obviar a la trabajadora Corea del Sur. Sin embargo, en el seno del plantel hay razones para soñar, hay una ilusión intacta y un razonamiento más que legítimo. Las cábalas son inevitables y es imposible no pensar más allá de la fase de grupos. La temida Estados Unidos es la gran favorita para liderar el grupo C y las cuentas son claras para el porvenir de los mexicanos: es posible clasificar para la segunda ronda, pero es necesario hacerlo en tercer lugar como mínimo. Quedar cuartos les mediría ante la poderosa y difícil de batir selección estadounidense.

Junto a la siempre activa presencia en la pintura de Ayón, Jugador Más Valioso en el FIBA Américas gracias a sus 17.5 ppj, 9.2 rpj, 2.1 apj, 1.4 robos e igual balance en bloqueos, se encuentra otro baluarte miembro de la familia NBA como es Jorge Gutiérrez, quien milita en los Brooklyn Nets. Suya será la tarea de la distribución del juego y la opción de hacer brillar a otros jugadores como Paul Stoll, Paco Cruz, Adam Parada o Roman Martínez, quienes deberán asumir un rol importante en las filas de México.

Habrá dos ligas en el grupo D del Mundial de España. Por un lado, las tres favoritas -- Lituania, Eslovenia y Australia -- tratarán de imponerse en el grupo, mientras que México, Corea y Angola, lucharán por una cuarta plaza descafeinada si Estados Unidos se impone en Bilbao.

CARA A CARA CON ANGOLA

Los africanos encarnan el dominio africano en este campeonato. Son muchas las virtudes de este equipo, sin embargo la presencia de su jugador más importante, Carlos Morais, será fundamental para que lleven a cabo sus intereses.

Se trata del primer angoleño en pasar por la NBA. Lo hizo de manera efímera en Toronto Raptors, donde permaneció poco más de un mes en 2013, justo el año en que se erigió como el Jugador Más Valioso del Afrobasket. Estuvo presente en el Mundial de Japón y los Juegos Olímpicos de Beijing y es sin duda el baluarte de los africanos. Base con maneras de escolta cuando hace falta, Morais contará con varios actores de reparto como Eduardo Mingas o Olimpio Cipriano, que buscarán dar vida a Angola en la segunda fase. Ed Lucas encarna la juventud de unos angoleños que también verán en este escolta una posibilidad de hacer daño en el perímetro con sus lanzamientos exteriores, siendo la defensa otra de sus virtudes. En líneas generales, el coach, José Guimaraes, cuenta con un plantel veterano, preparado para hacer frente a México y luchar por una plaza clasificatoria a pesar de contar con carencias de altura en la pintura que podrían dificultar mucho las cosas ante rivales como los propios mexicanos o Lituania.

COREA BUSCA LA SORPRESA

Corea del Sur es la perita en dulce del grupo -- en la teoría -- y será el equipo que marque la balanza. Será su sexta participación de la historia en un Mundial -- su última aparición fue hace 16 años en Grecia -- y lograron el tercer puesto en el Asiabasket celebrado en Manila. Jóvenes, inexpertos en lides del calibre del campeonato que se celebrará en España y con un buque insignia definido como es Ming-Goo Kim, los surcoreanos buscarán dar la sorpresa y dificultar las cosas a las otras cinco selecciones encuadradas en su grupo. Una de las virtudes de Corea del Sur es que su falta de exposición internacional y la militancia de sus jugadores en las ligas locales les hacen ser un plantel casi desconocido para todos. El elemento sorpresa será un elemento que podría ser diferenciador.

AUSTRALIA, SU MOMENTO

México también tendrá en Australia a un claro competidor para pasar de grupo. Conscientes de la superioridad sobre el papel de los australiano, que cuentan con nombres de la talla de Chris Goulding, Dante Exum, David Andersen o Joe Ingles. Veteranía y juventud conviven en armonía en el plantel dirigido por Andrej Lemanis, que busca mejorar la quinta plaza de los mundiales de Colombia 1982 y Canadá 1994. Cuentan con cuatro jugadores de la NBA (Cameron Baristow de Chicago Bulls; Aron Baynes, de San Antonio Spurs; Matthew Dellavedoda, de Cleveland Cavaliers y Exum, drafteado por Utah Jazz).

Exum simboliza el atleticismo de un equipo equilibrado que no contará con Andrew Bogut ni Paty Mills, pero que sigue teniendo valores suficientes para hacer un buen papel.

LITUANIA Y ESLOVENIA, FAVORITAS

Sin duda, los equipos más fuertes del grupo serán Lituania y Eslovenia. Los primeros cuentan con una experiencia fundamental en estas lides. Su tercer puesto en el Mundial de Turquía 2010 no es un imposible este año. Su gran virtud reside en su espeluznante juego interior gracias a jugadores de envergadura capacitados para aguantar el tipo durante todo el partido sin dejar de lado una intensidad que se ha convertido en su bandera.

Los jóvenes pívots, Jonas Valanciunas y Donatas Montiejunas, quienes pasearán sus 2.10 y 2.13 metros de altura en Toronto Raptors y Houston Rockets respectivamente, son los activos más brillantes del plantel de Europa del Este. Ambos serán los artífices del cambio generacional con un juego sólido en defensa y afinado en ataque gracias a su buen hacer en los lanzamientos de corta y media distancia así como en los tiros libres.

Eslovenia, por su parte, también goza de un protagonismo en el grupo D que le coloca como otro de los favoritos. Goran Dragic, ese armador que destila aromas al mejor Steve Nash, es sin duda el jugador a seguir. El base de Phoenix Suns parece haber encontrado su mejor juego tras limar sus carencias de actitud. Con 28 años de edad, se encuentra a caballo entre los jugadores más jóvenes y los más veteranos del equipo en un proceso de cambio generacional que incluye cuatro seleccionados que debutan en un Mundial.

La velocidad en los contraataques, la presencia en la pintura y la intensidad que son capaces de brindar sobre la duela, hace de los eslovenos un plantel de garantías para llegar a la segunda fase del grupo y quedar entre los ocho primeros de la cita mundialista, una aspiración difícil pero realista.

Así será el periplo inicial de una selección de México que dejará imágenes en HD durante el Mundial ante selecciones difíciles. Atrás quedó la sequía de aquel sepia setentero de antaño. Se viene una nueva generación y un proyecto que necesita de esta competición para saber dónde reside el verdadero lugar del básquetbol mexicano en el mundo.

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