La Copa Mundial de la FIBA ha concluido y ha llegado el momento de hacer un balance de lo que se vio y de lo que esto posiblemente signifique para los equipos de la NBA de cara a la temporada 2014/15.
He visto cada minuto de cada partido del Team USA. Se me quedaron grabados muchos momentos: desde los partidos uno contra uno entre Kevin Durant, Paul George y James Harden después de las prácticas del Team USA en Las Vegas, hasta la devastadora victoria sobre Serbia.
Echemos un vistazo a las diez principales conclusiones que extraje de la Copa Mundial de la FIBA y veamos qué significan de cara a la temporada 2014/15 de la NBA.
1. El desempeño del JMV, Kyrie Irving, no fue ninguna sorpresa
Aunque Irving sumó 26 puntos y anotó 6 de 6 triples en el partido por la medalla de oro, su electrizante actuación no fue ninguna sorpresa, ya que fue uno de los jugadores más regulares del Team USA a lo largo del torneo. Irving fue uno de los seis anotadores de dos cifras antes del duelo contra Serbia y estaba haciendo casi el 50 por ciento de sus tiros desde detrás del semicírculo. Fue prácticamente imposible impedir sus movimientos sin balón en la zona. Y quizá fue más evidente cuando demostró su valía en la defensa, al atacar los base del adversario en cada oportunidad que tuvo.
Las dos personas que seguramente estarán extasiados con el desempeño de Irving, son sus dos futuros compañeros de equipo en Cleveland: LeBron James y Kevin Love. El JMV del 2014 All-Star Game de la NBA ha añadido a su palmarés el premio al JMV de la Copa Mundial de la FIBA en apenas siete meses. El siguiente paso para Irving, en un mundo ideal, sería obtener el galardón al JMV de las Finales de la NBA. Su aparente mejoría y nuevo compromiso con la defensa podrían ser los factores clave para que pase de "bueno" a "grandioso". A sus nuevos compañeros de equipo no les importaría en lo más mínimo.
2. Klay Thompson es mejor de lo que se pensaba
Ha sido fácil olvidar lo bueno que Thompson ha sido con los Golden State Warriors durante sus tres primeras temporadas debido al éxito que Stephen Curry ha tenido. Pero esto está a punto de cambiar.
Mientras me preparaba para darle cobertura a la Copa Mundial de la FIBA, descubrí algo que muchos de los "insiders" de la NBA ya sabían: Thompson es un excelente jugador en los dos lados de la cancha, que con frecuencia defiende a los mejores base y escolta, independientemente de su posición, quitándole la presión al base Curry y la defensa de los Warriors.
Como suplente, Thompson promedió 12.7 puntos por juego y lanzó 41 por ciento desde la línea de los tres puntos. Pero su habilidad defensiva y su mentalidad para defender correspondiente fueron igual de valiosas para el Team USA.
Su juego ha enamorado al entrenador Mike Krzyzewski, quien comentó durante la concentración del equipo: "[Thompson] juega enojado todo el tiempo". Esa mordacidad y su capacidad para liberar la bola con una fracción de segundo hizo que Thompson fuera parte importante del éxito del Team USA. Los Minnesota Timberwolves sabían perfectamente por qué los Warriors no incluirían a Thompson como moneda de cambio por Love. Veremos mucho más de Thompson en el 2014-15.
3. La brecha entre los Estados Unidos y el resto del mundo está creciendo
Asimilemos lo siguiente: Team USA ganó nueve juegos al hilo con un margen de puntaje promedio de 33 puntos.
Con el declive de la "generación dorada" del baloncesto argentino, el retiro de los españoles Pau Gasol y Juan Carlos Navarro de la selección nacional y los talentosos jóvenes de la NBA esparcidos por varios países, la brecha entre los Estados Unidos y cualquier equipo que pueda suponer un reto para ellos ha crecido.
Si existiera una consecuencia del renacimiento del basquetbol estadounidense bajo Jerry Colangelo y Krzyzewski, sería que las estrellas de la NBA que están representando al país en los juegos olímpicos y de la FIBA están haciendo que jugar para la selección nacional sea otra vez atractivo.
Por otra parte, por cada Dario Saric o Jonas Valanciunas que se convierta en estrella de Croacia o Lituania en la próxima década, el basquetbol estadounidense producirá veinte jugadores del mismo nivel. La cantidad de estrellas a nivel preparatoria y universidad que están en ascenso en el basquetbol de los Estados Unidos es impresionante.
Los jugadores de Estados Unidos están participando en eventos de la FIBA desde los 16 años de edad, acostumbrándose a las reglas de la FIBA desde a una edad cada vez más joven. Hay una competencia encarnizada entre los jugadores de las selecciones junior de los Estados Unidos, y las oportunidades cada vez mayores de obtener competencia de calidad durante el verano con entrenadores de básquetbol de los Estados Unidos han mejorado su juego también.
Así que, mientras LeBron James y Rudy Gal se despiden del Team USA, saluden a Jahlil Okafor y Jaylen Brown.
4. Kenneth Faried se ha convertido en un nombre familiar
Faried llegó al equipo estadounidense solo 30 minutos después de su primer entrenamiento a finales de julio en Las Vegas. Su energía y esfuerzo eran obvios y contagiosos. Coach K y su cuerpo técnico se enamoraron rápidamente del estilo de Faried, y aparentemente se había ganado un lugar en el roster como protagonista.
Finalmente, con la lesión de George y la salida de Love y Durant, la garra, capacidad para ganar rebotes y química en la cancha con Anthony Davis se volvieron indispensables. Faried inició todos los partidos, fue el cuarto jugador con más minutos jugados en el equipo y dirigió al Team USA en rebotes, tiros y quemaduras por fricción.
5. Será más difícil reemplazar a Jerry Colangelo que al Coach K
Krzyzewski ostenta un récord de 74-1 como técnico de la selección nacional de baloncesto masculino de los Estados Unidos y no ha perdido un solo juego desde el 2006. Ha sido el entrenador ideal en el momento ideal.
Se ha ganado el respeto de los jugadores estrella de la NBA, gracias a su habilidad para relacionarse con ellos, su capacidad para hacerlos comprender la importancia de representar a su país y su distinguible carrera como entrenador de Duke. Después de las Olimpiadas del 2016, será difícil reemplazarlo.
Como Coach K me dijo en la ciudad de Nueva York durante la concentración del equipo, será aún más difícil reemplazar a Colangelo, y usó la palabra "imposible".
Colangelo no solo ha colaborado con su entrenador en la toma de todas las decisiones importantes de básquetbol, también ha llevado al equipo de baloncesto estadounidense a un nivel nunca antes visto, gracias a los años que pasó perfeccionando su inteligencia comercial como dueño de un equipo deportivo profesional.
El antiguo dueño de los Phoenix Suns y Arizona Diamondbacks ha vinculado a los socios corporativos más selectos con el baloncesto de los Estados Unidos, incluyendo a Nike, una estrecha relación que se extiende hasta el 2024. Su mayor legado como presidente del baloncesto estadounidense quizá sea el haber cambiado la sede central a Tempe, Arizona, como parte de un proyecto urbano de construcción de $436 millones de dólares, llamado USA Place. Incluirá un centro de entrenamiento de baloncesto, un hotel, apartamentos y espacio comercial.
Resulta fácil comprender por qué Krzyzewski se sienta así con respecto a Colangelo.
6. Kevin Durant tenía la razón en cuanto a Anthony Davis
Lo que Davis mostró durante el torneo y en los tres partidos de exhibición previos, es apenas un preludio de su futuro estrellato en la NBA.
Aunque los problemas por faltas a veces lo mantuvieron en el banquillo (la culpa recaerá sobre los árbitros de la FIBA), Davis dominó en la defensa con 19 bloqueos en 8 juegos y ocupó el segundo puesto del Team USA en rebotes, después de Faried. Fue uno de los cinco jugadores en promediar 12 puntos o más por partido.
Aunque Davis ya había registrado un promedio de 20 puntos y 10 rebotes, y encabezado la liga en tiros taponados en apenas su segunda temporada en la NBA, a sus 21 años de edad, su potencial es infinito. Cuando Durant te nombra la próxima superestrella de la liga, quizá sepa algo.
7. Paul George formará parte del equipo olímpico del 2016
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Todas el mundo relacionado con el basquetbol estadounidense se estremeció la noche de la lesión de George en Las Vegas el 1 de agosto. Fue una de las lesiones más complicadas que he visto en mi carrera. No puedo olvidar la imagen de Irving estrechando a su padre y llorando después de la melé. En las siguientes semanas, tanto los jugadores como los entrenadores del Team USA, recurrieron al nombre de George como fuente de motivación para concentrarse en jugar juntos y jugar bien.
Ahora, con la medalla de oro de la Copa Mundial de la FIBA en la mano y un boleto automático para el torneo olímpico del 2016 en Brasil para el Team USA, George comenzará el largo camino hacia la plena recuperación. Suponiendo que regrese en buena forma para la temporada 2015-16, tengo la sensación de que Coach K se tentará el corazón y guardará un lugar para George en el roster que jugará en dos años.
8. Dario Saric y sus futuros compañeros de equipo de los 76ers
Una de las cosas más extraordinarias que escuché durante la Copa Mundial de la FIBA fue que los jugadores de los 76ers de Filadelfia, Michael Carter-Williams, Nerlens Noel y Joel Embiid, viajaron a Sevilla para ver a su futuro compañero de equipo Saric jugando con Croacia en el Grupo B. Formaron parte de un contingente dirigido por el director general Sam Hinkie y el entrenador Brett Brown.
Saric, quien probablemente pasará otras dos temporadas en Europa antes de incorporarse a los 76ers, tuvo un gran desempeño en la justa mundialista, promediando casi 12 puntos y 7 rebotes por partido. No sorprende que el basquetbolista de 2.08 m y 20 años de edad, haya sido uno de los mejores jugadores jóvenes del torneo.
Estoy seguro que valdrá la pena esperar a Saric, pero, por ahora, me alegra ver que la química con sus futuros compañeros de equipo ya haya comenzado a crecer.
9. La presión reventó las tuberías de España
La presión puede reventar tuberías o crear diamantes. España, uno de los favoritos a alzar la Copa Mundial de la FIBA en la más reciente edición del torneo, cedió a la presión y perdió ante Francia en los cuartos de final. Fue devastador, aunque no fue una total sorpresa.
Jugar con las expectativas que conlleva ser uno de los favoritos, con jugadores destacados que habían estado juntos desde hace mucho tiempo y jugando en casa, podría considerarse como una oportunidad o tal vez una carga.
España ganó sus primeros seis partidos casi con la misma facilidad que el Team USA. Únicamente Serbia estuvo a 16 puntos en la fase de grupos. Lógicamente, todo apuntaba a un España contra Estados Unidos en el partido por la medalla de oro.
Pero, contra Francia, la canasta se encogió para España, un equipo que contaba con una gran estrategia defensiva que buscaba tiros desde el perímetro, y se consiguió anotar 2 de 22 desde detrás del semicírculo. Con cada tiro desaprovechado, España se presionaba más y Francia ganaba confianza. Al término del partido, las estrellas españolas admitieron que no estaban concentradas contra un equipo al que habían vencido cómodamente en la fase de grupos. De hecho, no es tan fácil jugar el papel de favorito como se podría pensar.
10. Crece el legado de Mike Krzyzewski
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Incluso si Krzyzewski tiene razón al decir que será más difícil reemplazar a Colangelo, será imposible repetir lo que Coach K ha hecho por el baloncesto de los Estados Unidos. Egresado de West Point y miembro del Salón de la Fama de Naismith, Krzyzewski ha sido el hombre adecuado en el momento adecuado.
Aunque su récord de 75-1 y cuatro campeonatos consecutivos en el plano internacional habla por sí solo, la dignidad y clase con la que su equipo ha representado al país ha sido impresionante. Las expectativas en su puesto como entrenador del Team USA son excesivas --se espera que los estadounidenses ganen todos sus juegos--, además de que el resto del mundo del basquetbol desea que pierda. Hasta ahora ha cumplido de forma prácticamente perfecta.