MADRID -- El dudoso penal que todavía escuece en las filas del Tri ha convertido a Holanda en su bestia negra.
El dolor por la eliminación en la Copa del Mundo tras caer por 2-1 ante la 'Naranja Mecánica' se ha transformado, al paso de los meses, en un "mal sabor de boca" para los jugadores que participaron en el encuentro, explicó Javier Aquino, quien asegura que "ganarles por la última..." fue lo primero que pensó cuando se enteró de que será ese, precisamente, su próximo rival en el amistoso que se disputará el próximo mes de noviembre en Amsterdam.
"No es tanto el dolor; se recuerda con mal sabor de boca", señaló el jugador del Rayo Vallecano en entrevista con ESPN.
Aquino, quien disputó la última media hora del encuentro al entrar sustituyendo a Giovani dos Santos, quiere cobrar venganza, pues "aunque se diga que no, sí pega" y mantiene fresco el recuerdo de la "frustración" que sintió cuando sonó el silbatazo final.
"Es un nuevo ciclo, quedó atrás, pero jugar contra ellos siempre será importante. Cuando nos eliminaron sentí frustración, tristeza, desilusión por la manera en que se dieron las cosas. El equipo había hecho un gran partido y al final de cuentas no nos alcanzó. La forma en que nos ganan sí duele, pero hay que levantar la cabeza y ver hacia adelante", relató el jugador mexicano, quien describió como "muerto" el ambiente en el vestidor tras la dolorosa derrota.
"Totalmente nulo el ambiente, muerto. Cada quién pensando lo que había pasado. Era... prácticamente nada", señaló el jugador nacido en Oaxaca, quien destacó el respaldo de Miguel Herrera y el apoyo masivo de la afición como factores cruciales para que el equipo empezara a reponerse.
"Miguel siempre ha respaldado mucho a los jugadores. Se da cuenta que el equipo se entrega dentro del campo. Claro que él estaba molesto por la forma en que se perdió pero intentó dar ánimo a todos. Es un gran entrenador. Yo no soy mucho de leer después (de perder) pero no sólo en las redes sociales, también personalmente, en la calle cuando te encuentras a la gente, nos han demostrado muchísimo apoyo y hay que agradecer a la gente en México que hayan mostrado ese apoyo a la selección", dijo.
Aún así, la herida no ha terminado de sanar a cuatro meses de distancia, pues el extremo del Rayo Vallecano dejó ver que no le quedó claro que se haya tratado de un penal, aunque respeta la decisión del árbitro.
"Estaba un poco cerca en la jugada. Es una jugada... para un árbitro, a juzgar. A su criterio, su forma de ver el partido, en ese momento decidió marcar la falta y no pudimos hacer nada", lamentó.