BUENOS AIRES -- Huracán y Atlético Tucumán pugnarán por la última plaza de ascenso que otorga la zona B de la Primera B Nacional cuando se midan desde las 18.10, con Independiente Rivadavia Mendoza y Santamarina de Tandil, respectivamente.
En el estadio Tomás A. Ducó, el local Huracán (26 puntos), flamante campeón de la Copa Argentina, se jugará sus fichas ante una Lepra mendocina que recién en las últimas horas aseguró su viaje hacia Buenos Aires, ya que el plantel había dispuesto adherirse al paro, en virtud de la falta de pago de sus salarios.
En el Monumental José Fierro, Atlético Tucumán (26) recibirá a Santamarina de Tandil (24), que todavía ostenta ligeras posibilidades para apoderarse del quinto puesto y así acompañar a Unión de Santa Fe (41), Crucero del Norte de Posadas (33), Temperley (32) y Sarmiento de Junín (30), que ya son de Primera.
Huracán, después del desencanto y la frustración por resultados negativos, vive este presente con ilusión y entusiasmo. Ya no está en el banco de suplentes el DT Frank Kudelka y el piloto de tormentas por estos días se llama Néstor Apuzzo, el interino con el cual el Globo se abrazó a la gloria en la final de la Copa Argentina, al derrotar en los penales a Rosario Central.
El equipo de Parque de los Patricios, que viene de golear por 3-0 a All Boys en Floresta, no podrá tener al lateral izquierdo Carlos Arano, quien está afectado por una rotura ligamentaria en su rodilla izquierda. Su reemplazante será Guillermo Sotelo.
Por su lado, Independiente Rivadavia, envuelto en inconvenientes económicos e institucionales, mantiene tres incógnitas para definir la formación inicial.
Por su parte, Atlético, con infinidad de jugadores lesionados (Cristian Lucchetti, Gastón Giménez, Iván Etevenaux) pondrá en cancha a lo mejor disponible para alcanzar una victoria que, en principio, si también gana Huracán, le garantizar jugar un encuentro desempate.
Santamarina, por su lado, necesita dar el batacazo en Tucumán y que Huracán pierda ante los mendocinos, para situarse en la quinta posición y convertirse en el último ascendido a la Primera División.