Delfina Moyano 9y

La hormiga atómica colombiana

BUENOS AIRES -- La evolución natural del hombre indica que para aprender a correr hay que saber caminar y para saber caminar antes hubo que gatear. Hay seres extraordinarios, cuyo talento y alquimia, les permiten saltear ciertos pasos evolutivos. Tal es el caso de Mariana Pajón Londoño.

La colombiana de 23 años nacida en Medellín, se encuentra en ese reducido grupo de dotados que nacen eximios en su profesión, su pasión, su leit motif. Nacida en una familia de deportistas, su padre un corredor de autos y su hermano, un prometedor corredor de karts, esta dama es conocida como "La reina del BMX". 'Mi primera bici fue la misma que usó mi padre y con la que aprendió mi hermano. Es roja y aún la conservamos'.

Su amor al vértigo y a la adrenalina la han llevado a la gloria en numerosas ocasiones arrasando con las pretensiones de sus más aguerridos rivales y dejando en claro su poderío en el BMX. A su corta edad ha pisado varios podios de BMX en diferentes escenarios internacionales. Ha pasado más tiempo dentro de las pistas de BMX que en el parque; a los 3 años de edad Mariana ya comenzaba a entrenarse para el brillante futuro que la aguardaría. 'A los siete años yo iba al colegio y cuando terminaba mis tareas sabía que me tocaba entrenar. Cuando mis padres llegaban a casa yo ya tenía el casco puesto, los guantes, el uniforme'. Fue allí que sus padres se dieron cuenta que el destino de Mariana había diseñado ya su curso.

Pero no fue tan fácil para Mariana, ya que inicialmente hubo cierta oposición por parte de algunos miembros de su familia a la práctica deportiva competitiva, a causa de los riesgos que ésta traía aparejados (sufrió una fractura de clavícula a los cinco años). 'Mi madre intentó incitarme a la práctica de la equitación y la gimnasia, sin mucho éxito'. La oposición cesó luego de que Mariana mostrara sus habilidades deportivas, especialmente en 2000, cuando con apenas nueve años, obtuvo en Argentina su primer título, en una competencia en la que fue la única participante femenina.

Mariana comenzó a competir en BMX con cuatro años de edad y con nueve ya era campeona del mundo. En 2008 el BMX pasó a formar parte de los Juegos Olímpicos y, como deportista olímpica potencial para 2012, se invitó a Mariana al campamento juvenil olímpico de Pekín 2008 como preparación para las siguientes Olimpiadas. En 2007 y 2008 Mariana ganó el premio colombiano a la Mejor deportista femenina junior colombiana, además de ser nombrada Atleta del año 2011. En las pistas internacionales se ganó el apodo de la 'hormiga atómica' por su forma tan particular de correr, con explosión, rudeza y agresividad.

Tras recuperarse de una lesión sufrida en un accidente a principios de 2012, Mariana hizo realidad su ambición de competir en los Juegos Olímpicos de verano ese mismo año. A su regreso a casa ya era campeona olímpica. 'Hoy, a dos años de los Juegos Olímpicos y ya enfocándome en Río 2016, sigo asombrándome cuando escucho a alguien decir que soy campeona olímpica'. Y no es para menos, ya que nuestra heroína es apenas la segunda medalla de oro olímpica en la historia de Colombia. El único oro olímpico que había logrado Colombia estaba en manos de la pesista María Isabel Urrutia, quien se colgó la presea dorada en Sydney 2000. 'Llegar a los Juegos Olímpicos es el sueño de cualquier atleta, e implica mucho trabajo y dedicación. Mi familia me formó y siempre me sostuvo de la mano. Esa medalla la ganamos juntos', recordó Mariana con emoción.

El éxito de Mariana continuó en 2013 a pesar de una serie de lesiones sufridas. Se adjudicó el título de campeona panamericana, sudamericana y norteamericana y hasta una medalla de oro en la prueba de contrarreloj del Campeonato del Mundo de BMX en Nueva Zelanda.

Además de ser campeona olímpica, Mariana ha sido ganadora de varios campeonatos mundiales, nacionales, estadounidenses, latinoamericanos y panamericanos, entre otros.

'Hay más presión cuando uno tiene que salir a ganar como favorito. No quiero que me recuerden como la campeona olímpica sino por la chica que dejó un legado más allá de un oro'. Fortaleza y claridad mental, una combinación fundamental que hacen de Mariana la chica humilde, tenaz y positiva que es.

UN 2014 PARA LA POSTERIDAD
Si los logros del 2013 y los años previos que vieron a Mariana colgarse medallas y premios no eran suficientes para demostrar esa supremacía en el deporte, el 2014 se ocupó de dejar asentado precedente sobre piedra.

¿Comenzamos el recorrido? Medalla de oro y bronce en el Mundial de Holanda, doble oro en la Copa del Mundo de Santiago del Estero, doble oro en la Copa del Mundo en Chula Vista (California), doble oro en los Juegos Odesur, plata en la Copa del Mundo de Berlín, y oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Veracruz, refrendando el oro que conquistó en 2010.

Por último, Mariana quiso terminar el año con un estruendo y se superó a si misma logrando el bicampeonato en el Trofeo de las Naciones en Francia, conquistando el título francés por segundo año consecutivo y donde por enésima vez se erigió como la gran figura de las series por mangas.

Como si fuera poco, fue elegida como una de las 50 deportistas más atléticas del mundo por la revista Sports Illustrated, ocupando el puesto 35. Las elegidas debían reunir a las mujeres más ejemplares en varios campos del deporte mundial: Fortaleza, velocidad, agilidad y resistencia.

Llegando a fin de año y con las Fiestas en puerta, al igual que todos los mortales, Mariana tiene sus sueños y deseos bien plantados para el 2015: "Quiero dar la mayor cantidad de puntos a mi país para luego poder ser elegida para competir en los Juegos Olímpicos de Río 2016, motivo por el cual mis metas más cercanas son los Juegos Panamericanos y el Campeonato del Mundo. No me quiero adelantar o apresurar, que las cosas se vayan dando con esfuerzo y voluntad. De esa manera creo que vamos a llegar a Río muy sólidos y bien plantados como país".

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