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VIGO -- El internacional argentino, Augusto Fernández, futbolista del Celta de Vigo español, reconoció que el vestuario de su equipo está "golpeado" y su ánimo "no es bueno" después de perder ante el Athletic Club, en la ida de los octavos de final de la Copa del Rey. "Estamos golpeados más que nada porque el objetivo era mantener nuestro arco a cero y nos han hecho cuatro goles. No hay que mentir ni ser hipócrita, la eliminatoria está complicadísima", afirmó el centrocampista en su comparecencia ante los medios de comunicación. El capitán cree que las críticas que ha recibido su entrenador, Eduardo Toto Berizzo, son "injustas" porque, para él, los culpables de la mala dinámica que atraviesa el equipo son los futbolistas. "La responsabilidad es de los que entramos en el campo de juego porque durante la semana el cuerpo técnico trabaja muchísimo y está atento de cada partido y de cada detalle", comentó Fernández, quien reiteró que la forma de salir de esta situación es "trabajar más". "Muchas veces hemos dado muestra de que este equipo tiene personalidad, yo estoy convencido de que vamos a levantar esto, la solución está en insistir e insistir. El equipo tiene que confiar en la idea que nos llevó a sumar 20 puntos y a partir de ahí corregir las cosas que se están haciendo mal", manifestó. Admitió que la "presión" es ahora "más grande" porque, después de sumar un solo punto de los últimos 21 en juego, la distancia con los equipos de la zona de abajo se ha acortado. "De las malas rachas se sale si uno se aferra a sus oportunidades, y el sábado tenemos la primera. El Valencia tiene un buen equipo y llega en un buen momento, pero en la situación en la que estamos nuestra mira tiene que estar sólo en nosotros, da igual el rival que venga", señaló.
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