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Agustí Benedito avisa a Nike

BARCELONA -- La firma del Manchester United con Adidas, que le pueden suponer al club inglés unos ingresos aproximados de 1000 millones de euros en los próximos diez años, puso en guardia a los grandes clubs europeos, entre ellos el FC Barcelona, que entendió absolutamente desfasado el contrato que mantiene con la multinacional norteamericana.

ESPN adelantó hace ocho meses que la directiva de Bartomeu se puso en contacto con los ejecutivos de la firma de Oregón para modificar el contrato (actualmente Nike paga poco más de 30 millones de euros anuales), con unas cifras más acordes al potencial del club y fuentes cercanas a la junta admitieron la existencia de conversaciones al respecto. Y esa circunstancia fue directamente criticada por Agustí Benedito.

"Pedí expresamente a esta directiva que se abstuviera de tomar ninguna decisión que pudiera condicionar al equipo directivo que entre en el club tras las elecciones", proclamó el candidato, quien recordó que los plazos para todo están claros: "El contrato con Nike vence en el año 2018 y una cláusula establece que su revisión debe hacerse en el primer semestre del año 2016. No es ahora cuando corresponde hablar de esta revisión de contrato".

El empresario catalán advirtió que en verano "habrá una nueva junta directiva y puede tener planes diferentes para enfocar estas negociaciones, por lo que es imprescindible que la junta saliente de Bartomeu no tome decisiones en este asunto. Eso debe hacerlo la directiva que sea elegida porque la actual ya no está legitimada para firmar este tipo de contratos".

Benedito lanzó un mensaje claro a Nike, dando muestras de que, en su opinión, la multinacional norteamericana deberá mejorar, mucho, su oferta para permanecer ligada al Barça. Y sin nombrar a ninguna marca de la competencia (Adidas principalmente) expresó que por encima de todo "nuestro interés será defender los intereses del Barcelona. Nike no deja de ser un proveedor más, como otros que hay en el mundo. La preferencia puede ser para ellos porque Nike ha sido un partner excelente durante muchos años y me consta que las relaciones son buenas, pero dando por hecho que el acuerdo debe ser bueno para las dos partes, el Barça no puede quedar por detrás de los grandes clubs mundiales", sentenció.

En un tema que podría entenderse más residual, pero que el candidato comprende que llama la atención al aficionado, la camiseta de la próxima temporada que provoca tanta controversia no le dejó impasible. "Salimos de demasiados colores que no son los nuestros. Hablamos del azul y grana, pero es que habría que ver en cuantos partidos jugamos como tal... He visto al Barça de fucsia, verde, rosa, amarillo", se molestó el presidenciable, no ocultando su sorpresa con el nuevo diseño del uniforme.

"La nueva camiseta levanta muchos desacuerdos y he podido constatar que hay mucha gente a la que no le gusta. En mi opinión deberíamos recuperar la camiseta con franjas verticales azules y granas", proclamó Benedito, quien advirtiendo que puede ser tarde para frenar esa nueva indumentaria horizontal, sí avisó que "entendiendo que los contratos con los proveedores de material deportivo exigen alguna renuncia, deberíamos recuperar un equilibrio que evitase que el Barça se aleje de su indumentaria histórica tantos partidos".