MÉXICO -- Los Pittsburgh Steelers se confirmaron como el mejor equipo en la década de 1970 tras conseguir su cuarto título, segundo consecutivo, a costa de Los Angeles Rams en el Super Bowl XIV el 20 de enero de 1980 en el Rose Bowl de Pasadena, California.
Como dato, el Super Bowl XIV impuso récord de asistencia con 103,985 espectadores confirmados en el estadio.
El elegido: El mariscal de campo Terry Bradshaw fue seleccionado por segundo año consecutivo como el Jugador Más Valioso del Super Bowl, tras superar las 300 yardas aéreas y lanzar dos pases de touchdown.
Bradshaw fue crucial en el último cuarto al dirigir dos series de touchdown que dieron el triunfo a Pittsburgh.
Los argumentos: Pittsburgh estaba abajo en el marcador al inicio del último cuarto, sin embargo surgió la figura de Bradshaw para guiar a los Steelers a la zona final en dos ocasiones, dándole a la franquicia su cuarto título en seis años.
Bradshaw se convirtió en el segundo jugador en la historia en ser elegido Jugador Más Valioso del Super Bowl en años consecutivos, uniéndose a Bart Starr de los Green Bay Packers.
La controversia: Bradshaw lanzó tres intercepciones al completar 14 de 21 pases en el partido, y si bien logró guiar al triunfo a los Steelers, el equipo se benefició de su gran defensiva que mantuvo el partido apretado.
Lynn Swann terminó con cinco recepciones para 79 yardas y un touchdown y John Stallworth sumó tres recepciones para 123 yardas y la anotación que significó la victoria, lo que sin duda les da argumentos para haber peleado por el galardón.
El resultado: Los Steelers, que llegaron como favoritos por 10.5 puntos, se llevaron el triunfo 31-19 sobre los Rams, consolidándose como la primera gran dinastía de la NFL en la época moderna.