Rafael Zamorano 9y

Se revierten los papeles entre la NFL y el dueño de Patriots, Robert Kraft

PHOENIX -- Los papeles se han revertido. Los New England Patriots, por conducto de su propietario, Robert Kraft, han asumido el papel de víctimas luego del escándalo de los 11 balones irregulares que se emplearon durante la primera mitad del Juego de Campeonato de la AFC frente a los Indianapolis Colts.

El usualmente mesurado Kraft tomó el podio este lunes para lanzar un fuerte mensaje al resto de la liga.

"Quiero dejar muy en claro que creo incondicionalmente que los New England Patriots no han hecho nada mal", dijo Kraft a los medios a la llegada de sus Patriots a Arizona, donde disputarán el próximo 1° de febrero el Super Bowl XLIX ante los Seattle Seahawks.

Además, Kraft fue todavía un paso más allá, al referirse a la investigación que realiza la NFL en el asunto, señalando que si la pesquisa de la liga resulta infructuosa, él espera "una disculpa por parte de la liga hacia todo el equipo".

Kraft también añadió sentirse "decepcionado por el modo en que todo el asunto ha sido manejado y reportado", apuntando el dedo a la liga y a la prensa. "Esperamos hechos concretos en lugar de evidencia circunstancial filtrada, respecto a la investigación".

Los comentarios de Kraft llegan un día después de que Bill Belichick, entrenador en jefe de los Patriots, dijera en conferencia de prensa el domingo, antes de volar a Arizona, que "se trata del fin del asunto para mí en mucho tiempo, ¿ok? Nos espera un gran partido, un gran reto para nuestro equipo de fútbol americano, y ahí es donde debe estar nuestro enfoque.

De sobra está decir que el tema no se quedó en casa.

Cuando los reporteros cuestionaron a Belichick sobre si espera una disculpa por parte de la liga para el caso de que la investigación no encuentre pruebas en su contra, o su equipo resulte exonerado, Belichick fue esquivo.

"Aprecio la pregunta", delineó Belichick. "He invertido, como ustedes saben, bastante de mi tiempo, he realizado dos conferencias de prensa sobre ello. Mi atención está totalmente volcada hacia los Seattle Seahawks y nuestro partido del domingo, y ahí estará esta semana".

La reacción de Kraft, y su aparente distanciamiento de la NFL, ocurre un día después de que el esquinero de los Seahawks, Richard Sherman, dijera a reporteros no esperar que la liga imponga sanción a los Patriots por el incidente, citando una relación estrecha entre Kraft y Roger Goodell, comisionado de la NFL.

"¿Serán castigados? No lo creo", externó el extrovertido back defensivo de Seattle. "No mientras Robert Kraft y Roger Goodell se sigan fotografiando juntos en sus respectivas casas. [Goodell] estuvo apenas en la casa de Kraft la semana pasada previa al Juego de Campeonato de la AFC. Allí hay conflicto de intereses. Mientras eso suceda, no les afectará en lo mínimo".

Este mismo lunes, Pete Carroll, entrenador en jefe de los Seahawks, apoyó el derecho a formular su propia opinión de Sherman, pero no se mostró necesariamente de acuerdo con ella.

"Richard tiene una visión que posee y Richard tuvo una opinión sobre un tema", justificó Carroll. "No pienso que conozca al comisionado y al Sr. Kraft muy bien. No creo que tengan una relación de tiempo, pero [Sherman] tiene una opinión sobre eso y la expresó".

Carroll antecedió a Belichick como entrenador en jefe de los Patriots, dirigiendo en New England durante las campañas de 1997 a 1999. Kraft adquirió a la franquicia en 1994, y bajo su mandato, los Patriots han llegado a siete Super Bowls, contando la edición XLIX que se jugará el domingo en el University of Phoenix Stadium de Glendale, Arizona.

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