Ricardo Puig 9y

Sin Copa, no hay juego

MÉXICO -- Guillermo Ochoa y Javier Hernández se apuntan a tener 5 largos meses a la espera del verano. A punto de cerrar el mercado de invierno en Europa, los dos jugadores mexicanos, casi marginados en sus equipos -Málaga y Real Madrid- parecen destinados, en caso de no ser colocados, a ver muy poquitos minutos hasta el final de la temporada.

Este jueves el equipo andaluz se despidió de la Copa del Rey, un torneo al que el Madrid ya le había dicho adiós un par de semanas antes. Dicha competencia representó para Paco Memo la única oportunidad de jugar. En total 8 partidos, 720 minutos y 6 goles recibidos. Javi Gracia, su técnico, tiene fe ciega en el camerunés Carlos Kameni y por eso, ya sin la Copa, la posibilidad de minutos en la Liga para el que fuera uno de los porteros sensación en el último Mundial, parecen reducirse a cero.

Málaga es 7º en la tabla, a sólo 6 puntos de puestos europeos, y hasta ahora ha recibido 21 goles; 5 más, por ejemplo, que el líder Real Madrid. La apuesta de Gracia, aunque en contra de los intereses de muchos en México, no parece tener argumentos sólidos para criticarse y por eso, el destino de Ochoa, que salió de Francia en busca de minutos y regularidad en España, no parece apuntar por mucho tiempo más a territorio malagueño.

El caso de Chicharito no es muy distinto y, de hecho, es aún más alarmante. Los merengues iniciaron la temporada conscientes de que jugarían por 4 torneos -Liga, Copa, Champions y Mundial de Clubes- y en ninguno de ellos Javier Hernández se ganó el lugar como titular. Hasta ahora, el mexicano apenas ha jugado 8 partidos, 5 de titular, para un total de 509 minutos y 3 goles. Los números son paupérrimos.

En lo que va de 2015 el Real Madrid ha disputado 6 partidos entre Liga y Copa; Chicharito apenas participó en uno de ellos, ante Valencia, y solamente 10 minutos.

En los últimos días sonó la posibilidad de que la Lazio de Italia pueda negociar con el Madrid por la carta de Javier, sin embargo, Carlo Ancelotti no estaría interesado en perder al mexicano; tal vez cubriéndose así de cara al cierre de temporada y para la cual el italiano no quiere que, en caso de perder la Liga o la Champions, sea por falta de opciones a la hora de mirar su banca.

Así pues, dos de las que serán las principales apuestas de Miguel Herrera para que la Selección Mexicana gane la Copa Oro de este año y pueda aspirar a jugar la Copa Confederaciones, apuntan a llegar al verano con muy poquito cansancio consecuencia de la falta de minutos, porque su realidad apunta a que sin Copa, no hay juego.

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