SAN JUAN - Roberto Alomar, Edgar Martínez, Juan González, Carlos Baerga, Carlos Delgado, Rubén Sierra, Bernie Williams, Carmelo Martínez y Ricky Bones volvieron a reunirse en el terreno del estadio Hiram Bithorn 20 años después.
La mayoría de los representantes de la generación más brillante en la historia del béisbol puertorriqueño, los integrantes del bien llamado 'Dream Team' recibieron el homenaje de la afición al cumplirse dos décadas de su triunfo invicto en la Serie del Caribe de 1995, antes del partido ante los Tomateros de Culiacán de México en el segundo día de la Serie 2015.
El día comenzó lleno de emociones para el grupo, ya que también recibieron un reconocimiento en el Senado de Puerto Rico.
La actividad se realizó en el salón Leopoldo Figueroa del Capitolio de la isla.
Delgado recibió con orgullo el reconocimiento a nombre de todos sus compañeros y el suyo propio. "Con mucho honor, mucha humildad y privilegio aceptamos este reconocimiento. Yo trato de ponerlo en perspectiva, esto era un trabuco de Grandes Ligas, definitivamente un equipo de primera. La calidad humana que está sentada en este escenario, no siempre se ve. Señor Presidente, un millón de gracias por este reconocimiento, nosotros esperamos servir de ejemplo para todos los niños y jóvenes para que puedan seguir jugando béisbol", dijo un sonriente Delgado.
En la noche, todos ellos se alinearon en el montículo para realizar de manera simultánea lanzamientos de honor, mientras en la pantalla del estadio pasaba una reseña de aquel torneo, uno de los más fuertes y competitivos que recuerde la historia de la Pequeña Serie Mundial Latinoamericana.
Y es que la huelga de peloteros que obligó a cancelar en agosto la temporada de Grandes Ligas en 1994 hizo que muchos peloteros latinos establecidos en la Gran Carpa se fueran a sus países para seguir jugando béisbol.
Los Senadores de San Juan, campeones de la liga invernal puertorriqueña, se reforzaron entonces hasta los dientes para regalarle a la afición de su país el privilegio de ver a sus estrellas coronarse en la Serie del Caribe ante sus archirrivales dominicanos, que contaban con estelares como Pedro Martínez y José Rijo.
Gloriosos años aquellos del béisbol puertorriqueño que ojalá volvamos a ver con la nueva generación de Carlos Correa, Javier Baez y Francisco Lindor, entre otras promesas.