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INDIAN WELLS -- 14 años después, Serena Williams vuelve a Indian Wells. Así lo afirmó la N°1 del mundo, en un interesante artículo publicado en primera persona por la revista TIME: "Emocionalmente, siempre me pareció que lo más fácil era permanecer alejada. Hoy aún hay muchos que dicen que no debería volver nunca. Otros que debería haberlo hecho hace varios años . Entiendo ambas perspectivas y he luchado con ambas por mucho tiempo. En este caso, estoy siguiendo lo que me dice mi corazón". La controversia con Indian Wells tuvo su origen en 2001, cuando Serena y Venus debían enfrentarse en semifinales, pero minutos antes del partido Venus se bajó aduciendo una lesión. Ya en la final, donde Serena jugaba ante la belga Kim Clijsters, el público expresó su bronca, asumiendo que el cruce entre las hermanas estaba digitado de antemano, y abucheó a toda la familia Williams (incluido el padre, Richard, que permanecía junto a Venus en la tribuna). En ese contexto, los Williams alegaron haber escuchado insultos racistas y desde entonces se mantuvieron al margen del torneo. El año pasado, Serena había dado indicios de un posible punto final para el sostenido boicot, pero finalmente volvió a desistir. En 2015, llegó la confirmación. "Las falsas acusaciones de que nuestros partidos estaban arreglados siempre nos hicieron mucho daño. Pero ya el trasfondo racista hizo de todo aquello algo muy doloroso, confuso e injusto. En un juego que amo, en un torneo donde atesoraba grandes recuerdos, de pronto me sentía sola, rechazada y con miedo", recordó Serena en el artículo. "No ha sido fácil olvidar las horas que pasé llorando en el vestuario después de ganar aquel título. De la vuelta a Los Angeles sintiendo que había sufrido la peor derrota de mi carrera: no en un partido de tenis sino en la lucha por la igualdad", siguió. "Lo que ocurrió en aquel torneo me persiguió por mucho tiempo -retomó-. Pero más de 13 años después y con una vida en las canchas de tenis, las cosas se sienten de manera diferente. Hace algunos meses, cuando el presidente de la Federación rusa, Shamil Tarpischev, realizó comentarios racistas contra mí y contra Venus, la WTA y la USTA lo condenaron inmediatamente. Eso me hizo recordar cuánto ha avanzado el deporte desde entonces y cuánto camino he recorrido yo también". "Tengo la suerte de estar en un punto de mi carrera en el que no le tengo que probar nada a nadie. Si vuelvo es por amor y por un nuevo entendimiento de lo que significa perdonar. Tenemos la oportunidad de escribir un final distinto", cerró la jugadora.
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