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Futuro incierto de Cotto y Haymon

El mundo del boxeo es un eterno campo de pruebas, donde promotores y pugilistas se obligan a tomar riesgos para valorar sus carreras, ganar más dinero o abrir espacios al crecimiento. En la mayoría de los casos, siempre existe la posibilidad de vaticinar el éxito o el fracaso, analizando la influencia de esos riesgos. Pero a veces, ni ese factor permite medir el resultado final de la aventura ¿Locura o genialidad? ¿Éxito rotundo o fracaso estrepitoso? Sobre esa línea tan delgada, parecen moverse en estos días el campeón mediano CMB y promotor de boxeo Miguel Angel Cotto y el enigmático promotor Al Haymon. Los dos apuestan, los dos arriesgan, pero es imposible vaticinar si sus movimientos son acertados o equivocados.

LA TRANSICIÓN DE COTTO

El campeón boricua dio en estos días un golpe de timón radical en su carrera, al unirse a la promotora Roc Nation del rapero Jay Z, que debutó el pasado 10 de enero con su primera cartelera en el Madison Square Garden. "Se trata de una apuesta para darle taller a nuestra empresa. Estamos trabajando fechas en Puerto Rico y en los Estados Unidos. Una alianza para dar mayor taller al boxeo, algo que hemos hecho por los pasados siete u ocho años" le dijo Cotto a ESPN.

Muchas conjeturas se podrían formular buscando una razón para la alianza entre promotores, pero es indudable que el nuevo escenario del boxeo tras la avasalladora aparición de Al Haymon, puede estar incidiendo en ese movimiento.

Tomando en cuenta el tamaño del establo que ha formado Haymon con sus boxeadores (se especula con que ya son 170 pugilistas), es imposible imaginar el futuro de cualquier promotora sin tener en cuenta que la larga influencia de Haymon estará presente en cualquier negociación. Y muchos no creen que las relaciones de las promotoras Top Rank (la anterior casa de Cotto) y Golden Boy Promotions sea muy saludable con Al Haymon. Eso, quizás, explique la sorpresiva alianza de Cotto con Jay Z.

Debemos aceptar que es una apuesta del boricua y como tal, estará sujeta al vaivén impredecible de los acontecimientos. Le puede ir bien o le puede ir mal, en eso pesará la suerte. Sin embargo, en este último tiempo Cotto con sus acciones no ha colaborado con el factor suerte. En primer lugar, cometió un error cuando se bajó de una posible pelea con Saúl 'Canelo" Alvarez por apostar a una revancha con Floyd Mayweather Jr. y luego se equivocó con una respuesta fuera de tono al CMB .

"Ninguna organización es dueña de mi carrera", dijo Cotto, en respuesta a Mauricio Sulaimán, presidente del CMB, quien dijo que el boricua, en caso de ganar en su próxima defensa voluntaria debe enfrentar al retador mandatorio, el kazajo Gennady Golovkin."

Como promotor, Cotto deberá negociar siempre con los organismos y en especial al CMB le debe demasiado como para provocarlos con un exabrupto de ese tipo. Muchas concesiones y facilidades otorgadas, le permitieron ganar una pelea anómala contra Sergio Martinez. Por ello es campeón, que no lo olvide.

HAYMON: ¿EL NUEVO DANA WHITE?

El empresario Al Haymon planea invertir en varias cadenas de televisión para promover sus campeones, no obstante la punta de lanza de su proyecto estrella, fue anunciado el pasado 16 de enero en una conferencia de prensa realizada en Nueva York: un acuerdo de varios años con la Cadena NBC y la puesta en escena de una Liga de Campeones (PBC) que promoverá no menos de veinte eventos durante el 2015.

Además de NBC, en otras cadenas el promotor ofrecerá sus eventos mediante la compra de tiempo televisivo y somos muchos los que creemos que Haymon está tratando de montar en el boxeo un modelo de negocio similar al de la UFC. Precisamente las carteleras de la Liga de Campeones estarán compuestas de manera íntegra por boxeadores contratados por Haymon.

Las similitudes son tan ostensibles, que hasta el propio presidente de la UFC, Dana White, no demoró en aplaudir la iniciativa y considero como un cumplido que Haymon esté imitando a su negocio. El principal de UFC recordó también que al principio nadie creía en su idea.

Desde mi punto de vista, no será fácil reproducir en el boxeo, el modelo de negocio exitoso de la UFC. Las Artes Marciales Mixtas no tienen la popularidad universal del boxeo ni tampoco han enfrentado competencia interna de otros promotores. Tampoco en las MMA existen organismos que controlen, administren y sean los encargados de otorgar los cinturones de campeones como si sucede en el boxeo. La UFC llegó para ocupar un lugar que estaba vacío, Haymon llega buscando ocupar un lugar que se encuentra demasiado lleno.

Mientras los campeones de Haymon se enfrentan entre sí, lo cual es saludable para el aficionado que desea ver a los mejores contra los mejores, en otra pantalla, desde otro lugar, estarán peleando otros campeones o surgiendo futuros monarcas. No necesariamente debemos apostar que en las carteleras de Haymon veremos las mejores peleas. El boxeo es un deporte planetario, que necesita muchas ventanas y que se mueve gracias a un vasto universo de promotores, descubridores de talentos, nuevos empresarios, cadenas televisivas grandes o pequeñas y nuevos mercados que surgen a todo momento.

Dana White, en su momento, compró a Strikeforce, su único competidor, y se transformó en el dueño del negocio. En el boxeo, no hay dinero que pueda comprar a toda la competencia ni tampoco sería recomendable hacerlo. Este deporte necesita de la expansión para atender, no solo su demanda, también para que todos pueden tener su cuota parte en el reparto de sus pérdidas y ganancias.

El futuro de Haymon, por esa razón, es toda una incógnita. Sobre él hablaremos mucho durante los próximos dos o tres años, después nadie sabe. Como tampoco nadie sabe si podrá mantener a sus campeones en la cresta de la ola. No olvidemos que los hará pelear entre sí y es bueno recordar que en el modelo UFC, aquél luchador que pierde más de dos veces, suele desaparecer del primer plano. Tampoco creemos que será fácil negociar con los principales organismos, cuando estos los obliguen a cumplir con las peleas mandatorias tal como está sucediendo con Miguel Angel Cotto.

¿Hizo bien Miguel Cotto al unirse con un promotor emergente como Jay Z? ¿Fue acertada su respuesta al CMB cuando éste le exigió enfrentar a Golovkin si vence en su próxima defensa voluntaria? ¿Se equivoca Al Haymon si pretende replicar un modelo de negocio parecido a la UFC en el boxeo? Me inclino a creer que sí se equivocan, aunque lo sufrirán con efecto retardado. Tal vez en un año o dos recién se verán las consecuencias.