BUENOS AIRES -- Cuando nuevos jugadores entran en la partida, el juego sólo puede mejorar. Y eso se espera del 67° Campeonato Mundial de Motociclismo y de su división principal, MotoGP, la que agrupa a los prototipos de 1.000 centímetros cúbicos capaces de desandar circuitos a más de 340 kilómetros por hora. Si el cuarteto principal que agrupa al bicampeón más joven de la historia, su clásico rival, una leyenda de probada vigencia y al aspirante eterno ya resultaba buena atracción, el agregado de un dúo de marca convocante y nuevos fabricantes suman tahúres a la mesa. Marc Márquez, Jorge Lorenzo, Valentino Rossi y Dani Pedrosa ya no están solos para repartirse las manos. Ducati levanta la apuesta con la GP15 confiada a Andrea Dovizioso y Andrea Iannone, al tiempo que Suzuki y Aprilia cuentan sus fichas para el comienzo.
La pretemporada dejó indicios que auguran luchas más cerradas que en 2014, cuando Márquez se acomodó temprano para el bicampeonato a fuerza de victorias, un pleno de diez en la primera decena de fechas. Aunque Lorenzo fue consistente en la segunda mitad del calendario pasado, Rossi mantuvo su regularidad anotadora y Pedrosa sacó de la manga una victoria -la que cortó la seguidilla de su compañero en Honda-, Márquez remató la faena cuando quiso y cobró temprano. Como si tomara el testimonio de la temporada anterior, el catalán marcó el pulso durante buena parte de los ensayos en 2015.
Honda mostró su poderío técnico en las prácticas: destinó cuatro motos para que el campeón Márquez eligiera chasis, le dio tres a Pedrosa y otras tres para los probadores. La marca del Ala logró una versión mejorada de su exitoso modelo 2014, ganador de 14 de las 18 competencias, hecho a la medida de Márquez. Yamaha progresó tanto en la evolución del chasis como en la potencia y entrega del motor, pero su avance más preciado lo aporta la nueva versión de la caja rápida. El dispositivo para cambiar marchas no regala directamente décimas por vuelta, sino que colabora en la erogación de potencia del impulsor para que la rueda trasera patine menos, lo que redunda en un mayor rendimiento de los neumáticos y permite que el piloto los exija más.
Luego de haber sido cuarto entre cuatro durante buena parte de 2013, Rossi logró el año pasado lo que parecía imposible ante la siguiente camada: ganó dos carreras y concluyó como subcampeón. Fue el mejor resultado de Il Dottore desde su último título mundial, en 2009. Con renovado plantel técnico a cargo de Silvano Galbusera, Vale se mostró más rápido que Lorenzo en la parte inicial del año, mientras el mallorquín penaba para entender los neumáticos y con la falta de forma con la que inició la temporada. Rossi mantuvo la consistencia anotadora para terminar 2014 como el mejor del resto. Este será un año distinto: Lorenzo ya avisó que se halla mejor preparado que 12 meses atrás y vuelve a colocar su postulación para el tercer título. Vale, en su penúltimo año de contrato como piloto activo de Yamaha, acaso también en su penúltima temporada, aspira a su décimo Mundial.
La última tanda de ensayos en Malasia terminó de espabilar a los que cavilaban sobre la nueva Ducati. La moto italiana, ahora sí creada por Gigi Dall'Igna, que según su responsable mantiene el ángulo de motor y el sistema de válvulas desmodrómicas que forman parte del ADN de la casa de Borgo Panigale, fue tan veloz como Honda y Yamaha. La concepción del chasis, diseñado a la par del motor, y la gestión electrónica han obrado un milagro inédito en Italia: que la GP15 doble. El prototipo tiene buena entrada y salida de las curvas, algo por lo que clamaron -en vano- desperdiciando buenos años Marco Melandri, Rossi, Nicky Hayden y Cal Crutchlow. Sus propios rivales admitieron que Ducati logró sus mejores tiempos sin recurrir al neumático extra blando que le estará permitido usar en clasificación gracias a su condición de Open. Ahora sí parece tener cómo apuntalar la apuesta de lograr al menos un triunfo este año para cortar una sequía de más de cuatro temporadas.
Con la última versión que hizo Ducati en 2014, el colombiano Yonny Hernández -ahora acompañado por el veloz italiano Danilo Petrucci- intentará mantenerse como animador permanente de la decena de punta, al tiempo que probablemente reciba elementos para desarrollar con la mira puesta en el reglamento de 2016. Si Suzuki soluciona sus problemas de motor, entonces Aleix Espargaró y el novato Maverick Viñales van a merodear por los mismos lugares que el sudamericano. Se trata de la vuelta oficial del constructor japonés, algo más armado que Aprilia, quien tomará este año como aprendizaje para el próximo.
El español Tito Rabat se dispone a defender su título de Moto2 mientras aguarda un buen sillín libre para saltar a MotoGP en la temporada que viene. El catalán tiene como nuevo compañero a su amigo Alex Márquez, hermano menor del bicampeón de la categoría reina, recién ascendido -y como campeón- de Moto3. La cilindrada menor renueva su promesa de carreras emocionantes con el estreno del francés Fabio Quartararo, campeón europeo de Moto3, para cuyo talento hubo una dispensa especial que le permitirá debutar sin que haya cumplido aún 16 años.
Vaya curiosidad, el calendario 2015 repite las 18 fechas del año precedente y en el mismo orden. Esto implica que la segunda visita a la Argentina luego del añadido de Termas de Río Hondo al programa mundialista será otra vez en tercer turno, último antes del desembarco en Europa. Quizá los nombres en el podio no sean tan repetidos esta vez. Trece de los 18 podios de 2014 tuvieron a tres de estos cuatro pilotos en sus escalones: Márquez, Rossi, Lorenzo y Pedrosa, los cuatro fantásticos. Austin, Le Mans, Assen, Aragón y Phillip Island fueron los lugares en los que liberaron algún escalón para el resto. Resultaron excepciones. Acaso este año, con más jugadores, lo que era excepcional se transforme en habitual.