LOS ÁNGELES -- El futbol de México tiene el privilegio de competir en los torneos oficiales de dos confederaciones que, aunque vecinas, no dejan de ser entidades diferentes. Una posibilidad que abre un mundo de oportunidades a varios jugadores, particularmente a los jóvenes, ante la necesidad de integrar dos selecciones.
"Sí, para el jugador es muy bueno el poder tener la opción de intervenir en alguna de las dos competencias. La Copa América ofrece la opción de poder encarar a selecciones como Brasil y Argentina, mientras que La Copa de Oro reviste una gran importancia, por todo lo que está en juego en ese torneo. Por ello, Miguel Herrera no se cansa de repetirnos que el objetivo es ir a ganar las dos competencias", aseguró Jürgen Damm, joven elemento del Pachuca, quien por primera vez recibe un llamado a la selección mayor.
"Si tengo algunos minutos en estos dos partidos, mi idea es tratar de aprovecharlos para que vengan más convocatorias", dijo por su parte un ilusionado Eduardo Herrera, centro delantero de los Pumas.
Herrera considera que sus características físicas, ser un jugador corpulento, de buena estatura, con un buen juego aéreo y con desplazamientos que le permiten jugar fuera del área, le pueden ayudar a establecerse como seleccionado.
"Cada jugador ofrece condiciones distintas y, por lo mismo, Miguel Herrera decidirá con quien juega y uno debe tratar de aprovecharlo, buscando hacer goles. Aquí hay jugadores de mucha calidad, lo que te puede permitir poder contar con muchos balones en el área".
Al mismo tiempo, el centro delantero universitario considera que no ha llegado al Tri con la idea de cotizarse junto otros atacantes que son o que han sido material de selección nacional.
"Las comparaciones no me gustan. Yo lo que pienso, es que siempre será más fácil jugar junto a futbolistas de esa calidad al lado tuyo. No me veo compitiendo con ellos, sino más bien jugando con ellos y eso siempre es benéfico para el grupo".
Jürgen Damm, por su parte, también espera, pacientemente, la oportunidad de su debut como jugador del equipo Tricolor, ya sea ante Ecuador o frente a Paraguay.
"Espero ser considerado para alguno de los dos partidos. Obviamente, lo que uno busca es jugar para demostrar en la cancha los méritos de un llamado a la selección. Sin embargo, esto también tiene que ver con la paciencia, con la serenidad, mientras tratamos de hacer lo mejor en cada entrenamiento- Yo sabré esperar mi turno, pues soy muy joven todavía".
Es por ello, que el extremo de los Tuzos también se muestra dispuesto a integrar cualquiera de los dos representativos nacionales, el que acudirá a la Copa America o el que buscará el título de la Concacaf en la Copa de Oro.
"No me importa para cual me convoquen, simplemente estar en la selección es un orgullo", destacó.
En lo que respecta a sus condiciones como futbolista, Jürgen Damm describió algunas de sus virtudes.
"Considero que la velocidad es importante, es un factor que te ayuda muchísimo para desequilibrar, para hacer diferencia. Yo tengo que explotar ese elemento al máximo y es algo que el profe Herrera me pide que haga".
Jürgen no pudo evitar referirse a su compañero de equipo, el ecuatoriano Walter Ayoví: "Se trata de un jugador con mucha jerarquía, es el capitán del Pachuca y a quien, de seguro, si me toca jugar, me lo encontraré por la banda".
También tuvo la oportunidad de compartir el balón con otro futbolista referente del futbol de la mitad del mundo.
"Tuve la suerte de estar en el Manchester United y aprendí muchísimo de Antonio Valencia, a quien considero un ejemplo a seguir, pues se trata de un gran futbolista y, además, un magnífico ser humano", concluyó el joven seleccionado mexicano.