Paola Núñez | Corresponsal 9y

Aguirre compareció más de una hora ante juez y se retiró en silencio

VALENCIA -- Más de hora y media duró la declaración del técnico mexicano Javier Aguirre ante la juez de instrucción de Valencia Isabel Rodríguez como uno de los 42 imputados en el caso del presunto amaño del encuentro entre Levante y Zaragoza celebrado en 2011 y cuyo resultado, una victoria por 1-2 de los maños, selló su permanencia en Primera División. El Vasco, por órdenes de su abogado, llegó y se retiró sin ofrecer declaraciones a la prensa.

Por primera vez en la historia del futbol español, un entrenador es llamado a declarar en una investigación judicial por el arreglo de un partido de la Primera División. Desde 2010, el artículo 286 del código penal español contempla como delito el fraude deportivo con sanciones para los individuos "cuyas acciones puedan predeterminar o alterar de manera deliberada y fraudulenta el resultado de una prueba, encuentro o competición deportiva".

A raíz de la reforma penal, el presidente de la Liga de Futbol Profesional, Javier Tebas, se ha puesto manos a la obra en un intento por limpiar el deporte, pues durante muchos años se ha sospechado de la venta de partidos, particularmente, entre equipos que pelean por conservar la categoría. Y es Zaragoza, justamente, uno de los nombres recurrentes en las sospechas y rumores que año con año anuncian el final de temporada en España.

Aguirre, quien dirigió al conjunto aragonés en la campaña 2010 -2011, fue citado a declarar en el último turno de la segunda jornada de interrogatorios, detrás del ex jugador del Zaragoza Lafita, los ex directivos Francisco Checa y Antonio Prieto, y el ex propietario del club Agapito Iglesias.

El mexicano acudió con tiempo a la cita. Con media hora de anticipación, alrededor de la 1:00 PM hora local, el mexicano llegó a la Ciudad de la Justicia de Valencia acompañado por su representante legal. De los cinco imputados citados a declarar este viernes, el entrenador fue el único que se detuvo un instante ante los medios de comunicación que se aglomeraban en la entrada principal al recinto.

"No puedo hablar por instrucción de mi abogado. Gracias por su comprensión", señaló el Vasco antes de ingresar al edificio. Su semblante, aunque serio, reflejaba cierta serenidad. Pero el Javier Aguirre que abandonó el edifico más de tres horas después se mostraba preocupado y esquivo. No fue hasta pasadas las 2:00 PM que llegara el turno al mexicano pues el interrogatorio a Agapito Iglesias se había extendido por cerca de dos horas.

Y es que el empresario aragonés se trata del principal sospechoso en el caso pues en la investigación e interrogatorios preliminares conducidos por el fiscal anticorrupción Alejandro Luzón, las pruebas apuntarían a Agapito Iglesias como principal responsable. En primera instancia, por urdir el arreglo del encuentro celebrado en la ciudad de Valencia por una cantidad cercana a los 965 mil euros. Según consta en la querella presentada por el fiscal anticorrupción, dicha cantidad habría sido repartida en depósitos de entre 85 mil y 90 mil euros a diez cuentas bancarias; la del técnico Javier Aguirre y la de nueve jugadores de su plantel, quienes dos días después retiraron el dinero en efectivo, según la querella, "para entregarlo a los jugadores del Levante".

En octubre pasado, el empresario había declarado que dichos depósitos correspondían al pago de primas a los jugadores. Sin embargo, su versión perdió fuerza cuando el ex capitán y actual jugador del Atlético de Madrid Gabriel Fernández, declaró en el interrogatorio preliminar que había "devuelto" el dinero al club obedeciendo órdenes de su directiva. Además, de acuerdo a lo que publicara El País en días recientes, existiría un documento firmado por los tres capitanes, Ponzio, Jorge López y Gabi, en el que consta que varios jugadores habrían acordado recibir dicho dinero para distribuirlo después, además de movimientos irregulares en las cuentas del club por cerca de 400 mil euros .

De ahí que llame la atención que la comparecencia de Aguirre, quien no se presentó a la investigación preliminar al encontrarse en Japón, donde ostentaba el cargo de director técnico de la selección nacional, tuviera casi el mismo tiempo de duración que la del ex propietario del club mientras el resto de deposiciones apenas duraron poco más de 40 minutos.

Para cuando Aguirre abandonó el recinto, hacía más de dos horas que las oficinas del juzgado se encontraban cerradas. Esquivo y astuto, el técnico mexicano intentó eludir a los medios de comunicación que esperaban a la salida del juzgado en la puerta secundaria, lugar que habían utilizado el resto de implicados, al abandonar el lugar justo por donde había llegado. La puerta principal.

Sin embargo, la suerte quiso que el taxi en el que viajaba se viera obligado a frenar en un semáforo. Aguirre, con gesto sumamente serio, repitió que el equipo de abogados que trabajan en su defensa le había recomendado guardar silencio con respecto al tema, aunque dijo estar "tranquilo". De momento, el técnico volverá a Madrid, lugar de residencia de uno de sus hijos, a esperar el desarrollo del sumario de instrucción, si bien podría tardar meses.

La siguiente ronda de declaraciones será el próximo 27 de abril y culminará el 5 de mayo, cuando el ex capitán Gabi se presente a declarar.

En caso de comprobarse el amaño, los implicados que resulten culpables podrían recibir condenas de entre seis meses y cuatro años, la inhabilitación de uno a seis años y multas de hasta 5.45 millones de euros.

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