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BUENOS AIRES -- El entrenador de Boca Juniors, Rodolfo Arruabarrena, advirtió tras la goleada sobre Estudiantes de La Plata que el equipo de ninguna manera debe confiarse porque cuando eso pasa "viene el palo", pensando tal vez en la fase eliminatoria de la Copa Libertadores de América. "Le ganamos a un equipo que tiene las ideas claras, que juega la Copa, que está primero en su grupo, pero esto recién empieza, lo tenemos claro; sabemos que esto es muy largo y donde te confiás viene el palo", afirmó Arruabarrena en la conferencia de prensa posterior al 3-0 ante los Pincharratas, por la séptima fecha del campeonato de Primera División. "El Vasco" enfatizó que Estudiantes "tiene jugadores de experiencia, jugadores de jerarquía y un entrenador que sabe lo que quiere", pero Boca afrontó el partido como si fuera una final "sabiendo que era uno más", superando las ausencias de Fernando Gago y el uruguayo Nicolás Lodeiro. "Es obvio que Fernando (lesionado) y Nico (convocado por el seleccionado uruguayo) son importantes para nosotros, pero las individualidades sobresalen cuando el trabajo colectivo es bueno. Lo importante es tener regularidad, y con ese pensamiento hoy hicimos bueno el punto que habíamos conseguido frente a San Martín en San Juan, tal vez sin merecerlo", sostuvo el conductor xeneize. El director técnico admitió a su vez que se vieron beneficiados por las expulsiones de los jugadores de Estudiantes Matías Aguirregaray y Carlos Auzqui, y comentó que antes del encuentro habló especialmente con Daniel Osvaldo porque sabía que iba a ser provocado por los defensores del Pincharrata. "Lo hemos charlado antes. Ellos tienen jugadores que se fastidian, nosotros también, entonces la cuestión pasa a ser quién se enoja primero. Había que ser más inteligentes y nosotros hicimos un partido correcto", deslizó, haciendo referencia a la discusión en la que Osvaldo le ofreció pasto al experimentado Leandro Desábato, el capitán de Estudiantes. En definitiva, para Arruabarrena el Boca de esta tarde fue un conjunto "serio, paciente, que no se desesperó hasta que el gol de Pichi (Cristian Erbes) dio tranquilidad, casi inmediatamente se aprovechó un contraataque y después las rojas beneficiaron". "El resultado siempre es importante, pero me quedo con que muchos jugadores tuvieron un nivel de seis, siete puntos, y con que supimos leer lo que demandaba el partido. A partir del martes empezaremos a pensar en Huracán, que nos va a plantear un desafío totalmente diferente", concluyó.
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