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Miami: Djokovic reaccionó y pasó a cuartos; Murray, con triunfo N°500

MIAMI -- Novak Djokovic estuvo al límite. Como en toda la semana, el serbio volvió a estar lejos de su mejor versión, pero esta vez le sumó jerarquía y recuperación para ganar 12 de los últimos 13 games e imponerse a Alexander Dolgopolov (65°) por 6-7 (3), 7-5 y 6-0 en octavos de final del Masters 1000 de Miami. Ahora, lo espera David Ferrer. Por su parte, Andy Murray venció a Kevin Anderson por 6-4, 3-6 y 6-3 y alcanzó su victoria N°500 en el circuito. También pasaron Kei Nishikori y Tomas Berdych.

Las cosas no estaban bien para Djokovic en el inicio. El warning cantado por el árbitro por el uso desmedido de una pelota (la tiró hacia la tribuna) fue una clara señal. También cuando estrelló su raqueta contra el piso al ceder por segunda vez su servicio en el 4-4, que le valió un segundo warning y, por defecto, un punto en contra al siguiente juego. Y ahí mostró una pequeña luz de recuperación, al quebrar y establecer el 5-5. Pero la historia seguía torcida. Errores, dudas y marcador en contra.

Djokovic, defensor del título y ganador de este torneo en tres de los cuatro últimos años, no llegaba fino al partido ante Dolgopolov, un rival excesivamente molesto si no se cuenta con buen timming. El serbio no recibía dos tiros iguales desde el otro lado de la red. Bola alta sin peso, pelota con peso, slice, aceleración. Mil variantes desde el lado del ucraniano. Y el serbio, puro sufrimiento. Fallas, desconcentración y 1-4 en el segundo set. Cerca del abismo.

Sin embargo, reacción. El N°1 del mundo bajó la velocidad de sus impactos, recuperó el quiebre en el 4-3 y comenzó su escalada. Controlando cada uno de sus impactos, sin caer en errores no forzados y con una sentida mejora en su movilidad, Djokovic se metió decididamente en el partido. Y Dolgopolov lo empezó a sentir. Vio la amenaza del serbio, forzó un poco más sus tiros y todo se le dio vuelta. El duelo, al tercero.

Y problemas para Dolgopolov, quien en el cambio de lado fue atendido por inconvenientes en ambos pies. Y mejores sensaciones para Djokovic, que rápidamente aprovechó la situación, quebró y, en un rally de 8-0 en puntos, se puso 2-0 en el marcador. Para colmo, otro quiebre, con el ucraniano prácticamente parado en la cancha. Golpeado en lo físico; y en lo anímico. No hubo equivalencias: Djokovic apenas dejó tres puntos en el tercer set y selló su pase a cuartos de final, donde lo espera David Ferrer.

Poco antes, Andy Murray arrancó con un gran ritmo. Quebró en su primer turno de devolución y ganó ocho puntos seguidos con el servicio -todos con el primero- para establecer una clara diferencia. Anderson poco a poco se metiendo en el partido, encontrando mejores sensaciones desde la devolución y poniendo en algunos aprietos al escocés, a tal punto de llegar a tener dos puntos de quiebre cerca del final. El N°4 del mundo pudo salir a flote del momento tenso y terminó sellando el set por 6-4.

Luego de caminar por la cornisa, Murray no la pasó bien en el inicio del segundo parcial. El británico tuvo un flojo juego con su servicio, jugando mucho con el segundo, y sufrió la rotura. El sudafricano, con el 70% de primeros y 7 de 7 en puntos, tomó envión y volvió a golpear con la devolución para un impensado 4-0. Hubo una pequeña reacción de Murray hasta el 2-4 y 0-30, pero Anderson fue rescatado por su servicio. La historia, al tercero.

La extensión del duelo no tuvo impacto anímico en Murray, que empezó a resolver los problemas desde la devolución: dos quiebres seguidos y, pese a ceder su saque, se vio arriba en el marcador por 4-1. Fue una sentencia. El británico no dejó escapar la distancia y cerró su pase a cuartos de final de Miami, esta vez con el plus de haber logrado su triunfo N°500 en el circuito. Su próximo paso, ante Dominic Thiem.

En tanto, Tomas Berdych se impuso a Gael Monfils por 6-3, 3-2 y retiro y se enfrentará en cuartos de final a Juan Mónaco, quien eliminó a Fernando Verdasco por un doble 6-3, mientras que Kei Nishikori doblegó a David Goffin por 6-1 y 6-2 y espera por John Isner, quien, en un partido sin quiebres, derrotó a Milos Raonic por 6-7 (3), 7-6 (6) y 7-6 (5).


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