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13 mil razones para festejar en L.A.

LOS ÁNGELES -- Sin mostrar todo su potencial, Los Angeles Clippers se deshicieron de unos Los Angeles Lakers voluntariosos que estuvieron cerca de darle un susto a sus vecinos (105-100).

Los Lakers llegaron a ponerse a cuatro puntos en los instantes finales, pero el poderío de los Clippers se acabó imponiendo ante los peores Lakers de la historia.

Entonces llegaron los récords.

Por un lado, Chris Paul (19 puntos y 10 asistencias) se erigió como el cuarto jugador de la historia de la NBA en superar los 13,000 puntos y 6,500 asistencias en menos de 700 partidos, algo que tan solo han logrado Magic Johnson, Isiah Thomas y Oscar Robertson.

"Jamal Crawford me lo dijo el otro día. Siempre quieres guardar estos logros para siempre, pero no sabía que estaba tan cerca. Es un gran honor el ser mencionado junto a estos jugadores", afirmó Paul tras el encuentro.

El armador es el máximo asistente de la competición con 10.2 apj y está mostrando un gran nivel en los últimos juegos. Acumula una media de 19.1 ppj.

Además de este récord, con la victoria ante los Lakers, los pupilos de Doc Rivers certificaron el séptimo triunfo consecutivo ante sus rivales y el onceavo de los últimos 12, lo que cierra la mejor marca de la historia de la franquicia ante sus vecinos.

Los Clippers siguen aguantando en la Conferencia Oeste en su afán por lograr la ventaja de campo de cara a los playoffs.

Ellos acumulan 11 victorias de los últimos 12 partidos y están a la caza y captura de unos Portland Trail Blazers que están mostrándose irregulares en el momento más importante de la temporada regular. Los San Antonio Spurs, por su parte, van ganando posiciones y también están al acecho de una ventaja de campo que se venderá muy cara al mejor postor.

Otra de las buenas noticias para los Clippers es el regreso de Crawford, quien estuvo apartado del equipo por una lesión en la pantorrilla desde el 2 de marzo. Se perdió un total de 18 partidos y en su regreso alcanzó cuatro puntos en 19 minutos.

"Estuve oxidado. Sólo jugué 19 minutos pero los sentí como si fueran 35. Era de esperar porque fue la primera vez que jugué cinco contra cinco desde que me lesioné. Comencé a correr la semana pasada. Creo que estos partidos son para esto, lo veo todo en términos generales", afirmó antes de confesar las mayores dificultades que ha sentido en su retorno.

"Fatiga, marcar los tiempos y ritmo. Eso fue lo difícil. Algunas veces pasé la bola cuando tendría que haber tirado y otras tiré cuando tendría que haber pasado", confesó.

Blake Griffin (27 puntos, siete rebotes y seis asistencias) volvió a brillar y a demostrar que su evolución en los lanzamientos de media distancia ha sido más que notoria. Se trata de una de las alternativas más efectivas a la hora de darle opciones ofensivas a los Clippers y le están sacando mucho provecho.

"Hace que sea muy difícil defendernos", apuntó Paul. "Muchos equipos intentan mantenernos en un lado de la duela y hay que tomar una decisión. Si dos contrarios van a defenderme a mí, entonces Blake queda libre. Cuando él es capaz de lanzar a canasta y asistir bien, dificulta mucho las cosas a los contrarios", declaró.

Otro de los jugadores que están mostrando un gran nivel en los últimos juegos de los Clippers es J.J. Redick (27 puntos), quien acaparó los halagos de sus compañeros y el coach.

"Cuando movemos la pelota, Redick logra canastas. No hay duda. Cuando el balón no se mueve, no tiene tantas oportunidades. Lo que intentan los chicos es que le llegue la bola lo máximo posible", señaló Doc Rivers.

Los Clippers tienen tres juegos por delante antes de que finalice la temporada regular. El más complicado será frente a los Memphis Grizzlies el sábado en el Staples Center. El lunes se medirán a los Denver Nuggets y el martes a los Phoenix Suns.