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Hawks vs. Wizards: Serie histórica

Los Washington Wizards y los Atlanta Hawks abren el telón de la segunda ronda de los playoffs en Atlanta este domingo en una serie que promete contar con intriga, muchos triples y por sobre todas las cosas la posibilidad de hacer historia para una de estas dos franquicias.

Los Wizards no llegan a la final de su conferencia desde 1979, mientras que los Hawks no lo hacen desde...bueno, en realidad ellos nunca han alcanzado esa instancia de la postemporada en la Conferencia Este y la última vez que lo hicieron fue como miembros de la vieja División Oeste en 1970. Esta es su gran oportunidad.

Este será un duelo en el que los pequeños detalles van a significar una enormidad, así que a continuación repasamos las claves de una serie con olor a siete juegos

Los Hawks ganan sí...: Salen dispuestos a dominar desde el arranque.

Aquellos que dicen que en el básquetbol solo importan los dos minutos finales del partido claramente no han visto jugar a los Hawks en su serie contra los Brooklyn Nets.

Los dirigidos por Mike Budenholzer abrumaron a los Nets con 36 puntos en el primer cuarto del sexto juego definitivo y así marcaron la pauta del partido.

En sus otras tres victorias ellos tuvieron 32, 29 y 33 puntos respectivamente. ¿En sus dos derrotas? 16 en el tercer juego y 24 en el cuarto. La actitud desde el salto inicial es lo que vale.

Los Wizards ganan si...: John Wall llega a otro nivel.

Wall es un gran base que ha madurado muchísimo desde que era un novato que tenía solo una velocidad, desenfrenada, cuando él era un mero novato en el 2010.

Cinco años después, él promedió 17,3 puntos y 12,5 puntos por partido en la serie que terminó con una barrida contundente contra los Toronto Raptors. Wall no solo superó a Kyle Lowry, el base de los Raptors, sino que dio cátedra ante un rival de su mismo nivel que no estuvo a la altura de las circunstancias.

Lo del armador de 24 años ha sido espectacular hasta ahora, pero lo que él debe hacer frente a los Hawks va más allá de las estadísticas.

Wall debe ser un líder con todas las letras, leer el partido durante los 48 minutos y marcar el ritmo mientras ayuda a irrumpir el movimiento constante del balón de Atlanta como primer obstáculo de Jeff Teague.

Factor X de Atlanta: DeMarre Carroll

Adivinen quien fue el máximo anotador de los Hawks en la serie contra los Nets. ¿Al Horford? No. ¿Teague? Tampoco. ¿Kyle Korver? No, sir. Carroll es la revelación de esta postemporada y lidera a su equipo con 17,5 puntos por partido.

Eso no solo sorprende porque Carroll promedió apenas 12,6 puntos durante la temporada regular, sino que porque él no suele ser siquiera la tercer opción ofensiva del equipo y no es como que existen una variedad de jugadas diseñadas para él.

Sin embargo, Carroll ha sido sumamente eficaz encestando un 54,3 por ciento de sus intentos y un 46,7 por ciento de sus triples durante sus 35 minutos en cancha. Juega mucho y lo hace bien mientras también baja 7,2 rebotes por encuentro.

Queda por verse si esto es una casualidad o una señal de lo que está por venir, pero el destino de los Hawks podría llegar a depender de la respuesta a esa pregunta.

Factor X de Washington: Disciplina táctica.

Los Wizards contaron con la décima mejor defensa de la NBA durante la temporada regular, pero ellos también perdieron tres de sus cuatro partidos contra Atlanta permitiendo 106,120 y 105 puntos respectivamente en cada derrota promediando 17 balones perdidos.

Regalar la pelota está estrictamente prohibido para ellos en esta serie, cada posesión vale oro. En defensa, los Hawks van a intentar alterar su orden moviendo el balón de lado a lado constantemente, así que deben evitar la desesperación y mantenerse alertas por 24 segundos.

En todo caso, será cuestión de elegir que prefieren: Anular a Al Horford y Paul Millsap en la zona pintada o evitar los triples de Korver, Carroll y compañía.

Vaticinio: Hawks en 7. Esta serie va a ser sumamente reñida, pero la ventaja de definirla en casa inclina la balanza a favor de unos Hawks que perdieron apenas seis veces en 41 partidos como locales en la temporada regular y todavía no lo han hecho en los playoffs.