LOS ÁNGELES -- Hubo que aguantar los aplausos a Gregg Popovich en la rueda de prensa posterior a la derrota de San Antonio Spurs en el Juego 7 ante Los Angeles Clippers. Como de costumbre en esta eliminatoria, el coach se sentó frente al micrófono antes de que los reporteros pudieran acceder a la sala. Poco a poco ésta se fue llenando. Pasaron algunos minutos hasta que se produjo la primera pregunta, tiempo suficiente para que 'Pop' tomara la palabra sin necesidad de que ningún periodista rompiera el hielo.
"Quiero decir algo primero. Generalmente nunca hago esto. Felicidades a los Clippers. A Doc y su cuerpo técnico, a los jugadores, fue una gran serie, jugaron muy bien. Los dos equipos jugaron con clase. No hubo tonterías en la duela excepto yo haciendo falta a Jordan", comentó con una media sonrisa. "Estoy muy contento por ellos y obviamente triste por nosotros por muchas razones. Clippers van en la buena dirección".
La manera en la que Popovich digirió la derrota fue ejemplar. El carácter que suele sacar ante los periodistas cuando las cosas no salen bien se suavizó, sacó su mejor versión, la más caballerosa, pocos minutos después de que su equipo se convirtiera en el quinto campeón de la historia de la NBA en quedar eliminado en primera ronda (en formato de playoffs formado por 16 equipos, 1983-84).
El coach supo reconocer que los Clippers lograron la gesta con un Chris Paul espectacular que fue capaz de superar una lesión en el tendón de la corva para darle la victoria a su equipo no sólo en el último encuentro de la eliminatoria, sino en la serie al completo. Los Spurs no encontraron la manera de frenar a un CP3 arrollador que logró 22.7 ppj y 7.9 apj de media en la serie. Cuando estuvo activo, los angelinos tuvieron una ventaja de 18 puntos.
Su presencia fue clave para eliminar a los tejanos, el factor suerte en determinadas acciones también, los errores rivales, la oportunidad perdida en el Juego 6 por parte de los Spurs, la lista de razones a evaluar es enorme, sin embargo todo se reduce a que unos siguieron adelante y los otros quedaron en el camino.
¿Y ahora qué? ¿Cuál será el devenir de unos Spurs que han creado escuela? Entre Popovich y Duncan han logrado vencer cinco títulos juntos en 15 años. Se dice pronto. Sólo Boston Celtics, Chicago Bulls y Los Angeles Lakers pueden presumir de esta gesta. La franquicia tejana afronta un verano decisivo. Tan solo hay cinco jugadores que tienen contratos garantizados. El propio Duncan, Manu Ginóbili, Danny Green y Marco Belinelli pasarán a ser agentes libres no restringidos, mientras que la esperanza futura, Kawhi Leonard, será agente libre restringido.
"La gente me ha preguntado sobre Tim, Manu y sobre mí en los últimos cinco años, sobre qué vamos a hacer. No tengo ni idea. Probablemente estemos de vuelta, el salario es estupendo. No piensen que estoy mintiendo", afirmó Popovich.
Duncan acaba de cumplir 39 años de edad y Ginóbili llegará a los 38 en julio. El internacional argentino dejó las puertas abiertas a una posible retirada tras esta temporada, mientras que Duncan prefirió no declarar nada al respecto.
Ahora es tiempo de vacaciones para unos, de reflexión y valoración, mientras que los otros seguirán inmersos en la dinámica playoffs. Los Clippers han demostrado que tienen equipo para rato mientras que los Spurs se acercan a la reconstrucción. Ambos equipos han dejado una serie para el recuerdo, será imposible olvidar los siete partidos que nos han brindado, la auténtica montaña rusa en la que nos han hecho viajar durante estas dos semanas.