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MADRID -- Florentino Pérez anunció esta tarde la decisión tomada por la directiva de cesar a Carlo Ancelotti como entrenador del Real Madrid. Acompañado por miembros de la junta directiva, con quienes se reunió este lunes, el presidente del club blanco compareció ante los medios de comunicación en la sala VIP del Santiago Bernabéu para confirmar lo que ya se veía venir desde el momento mismo en que el conjunto merengue se quedó sin opciones en la Liga hace dos semanas. 
Pérez se refirió a la "exigencia del Real Madrid" como argumento para despedir al técnico italiano, quien falló en la misión de llevar al conjunto merengue a ganar uno de los tres títulos grandes en disputa esta campaña.
"Ha sido una decisión muy difícil para la junta directiva. No hemos venido a tomar decisiones fáciles, sino las que son las mejores para la institución. Creemos que es el momento de dar un nuevo impulso para que el Real Madrid llegue a su máximo nivel", señaló Pérez en un breve pero contundente discurso. A ese "impulso nuevo" se remitió varias veces; cada que se le preguntaba por las razones que llevaron a la directiva a tomar la que asegura fue una "difícil" decisión y, sobre todo, en el momento en que se le recordó que la gran mayoría del plantel había manifestado su apoyo al técnico, empezando por Cristiano Ronaldo, el pasado sábado y terminando por Luka Modric, quien esta misma mañana afirmó que Ancelotti lo hizo "jugar su mejor futbol" en defensa del técnico. El intento de los jugadores de poner presión a la directiva valiéndose de sus cuentas en redes sociales, o lo que hiciera falta, para conservar a su líder llegó mal y tarde. Para Florentino Pérez la suerte estaba echada y, además, la opinión de los subalternos no es algo que se deba tener en cuenta para tomar decisiones administrativas, ya no se diga la de los socios, 73% de quienes, de acuerdo con una encuesta realizada por Marca, pedían la continuidad del italiano en el cargo. "No (se tomó en cuenta el apoyo del plantel)", señaló Pérez, quien, en cambio, intentó maquillar las contundentes muestras de apoyo de los líderes del vestuario como mera "manifestación del cariño que le tienen" al técnico, llegando tan lejos como negar que las acciones de los jugadores molestaran a la directiva. Todo lo contrario, las calificó de "correctas" dado el cariño que él mismo dices sentir por el hombre al que pocas horas antes había despedido pues "una cosa es el tema personal y otra cosa el profesional". "Yo he estado hablando con él (antes de su comparecencia); es un señor, un caballero y deja unas buenas relaciones con todos nosotros", relató Pérez en el mismo tono serio en que previamente había sentenciado al técnico que a partir de este momento "ya forma parte de la historia". Y una parte bastante importante si se toma en cuenta que fue bajo su batuta que el conjunto merengue logró obtener el campeonato de Champions League por primera vez en 12 años, la ansiada 'décima', y otros tres títulos: Copa del Rey, Supercopa de España y el Mundial de Clubes. De los fallos que la junta directiva pudo detectar en la gestión del técnico italiano, no quiso "entrar en detalles" al considerarlo "inoportuno", si bien ha trascendido en los últimos días que en las oficinas de Chamartín generó malestar la manera en que desaprovechó los recursos a su disposición con su política de mínima rotación, misma a la que se achaca la cascada de lesiones durante la campaña. "Nunca hay un culpable", respondió Pérez confrontado con el hecho de que el Real Madrid cerrará 2015 sin haber conquistado un solo trofeo. Se remitió, por tercera vez, a ese "nuevo impulso" que dice necesitar para hacer de su Madrid un proyecto exitoso Como colofón, Pérez aprovechó para defenderse de las críticas que le han llovido en los últimos días, pues es ya el tercer técnico cesado desde que volvió a hacerse con la presidencia del Real Madrid en 2009. Es el "deterioro" del puesto en un grande de Europa, opinó. "El puesto de entrenador está sujeto siempre a convivencia. Igual cuando estaba Mourinho en su tercer año; he odio que en el Madrid ha habido muchos entrenadores. Les animo a que vean los entrenadores que ha tenido Barcelona, Atlético de Madrid, Juventus, Bayern... Verán que es un puesto que sufre deterioro", remató. Según información procedente de Italia, Pérez tendrá que pagar un finiquito de 3.5 millones de euros por el despido del técnico -aproximadamente la mitad de los 7 millones netos que ganaría en caso de cumplir con su contrato hasta 2016. En tanto, el nombre del sustituto de Ancelotti "se dará a conocer la próxima semana", según anunció el mandatario merengue.
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