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ARLINGTON, Texas -- Josh Hamilton pasó toda la mañana jugando con sus cuatro hijas, y entonces condujo su auto al Globe Life Park donde jugará su primer partido como miembro de los Vigilantes de Texas desde 2012. 
Un puñado de fanáticos esperaban por autógrafos mientras él llegaba al estadio. La vida, según dijo, es buena.
Y se pondrá mejor a medida que encuentre su ritmo en el plato. Batea .167 (1-en-11) en tres juegos, pero él no tiene dudas de que eventualmente producirá los números que lo convirtieron en una estrella. "¿Qué jugador no tiene confianza de que va a poder hacer con el bate lo que siempre ha hecho? Cuando eso ocurre, uno tiene que retirarse", dijo Hamilton. "Cuando uno no se pone nervioso antes de un partido, o antes de tu primer turno o cuando estás en el terreno por primera vez uno no necesita hacerlo. "A mí me siguen pasando todas esas cosas, así que sí, pienso que puedo volver a hacer lo que hice en el pasado". Jugar para los Vigilantes le da la oportunidad de hacer eso. En su carrera de nueve años, Hamilton claramente tuvo sus mejores momentos en sus cinco temporadas con los Vigilantes, a quienes llevó a la Serie Mundial en 2010 y 2011. Él firmó un contrato de cinco años y $125 millones con los Angelinos de Los Angeles y tuvo problemas durante sus dos temporadas allí. Fue sometido a una cirugía de hombre a principios de febrero y tuvo una recaída en su sobriedad al final de dicho mes, lo que llevó a los Angelinos a cambiarlo a los Vigilantes por dinero en efectivo el mes pasado. La última vez que jugó en este estadio para los Vigilantes, los fanáticos lo abuchearon a viva voz mietras se ponchaba en el juego entre comodines ante los Orioles de Baltimore. Con los equipos Doble-A Frisco y Triple-A Round Rock, Hamilton pasó tiempo considerable firmando autógrafos e intentando reconstruir su relación con la base de fanáticos. "Siempre he disfrutado pasar tiempo con los fanáticos", dijo Hamilton, "porque si ellos no compraran su boleto, nosotros no tendríamos empleo". Dicho esto, nadie sabe qué tipo de reacción van a tener los fanáticos con él el jueves en la noche. "Va a ser algo emocionante", dijo. "Detenerse y firmar y hablar con los fanáticos, ellos están emocionados - al menos con los que he hablado - y yo estoy emocionado con las posibilidades de este equipo".
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