BUENOS AIRES -- El Fisco argentino denunció el jueves penalmente a tres empresarios implicados en un escándalo de corrupción de la FIFA cuyo arresto con fines de extradición solicitó Estados Unidos.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) denunció por "evasión tributaria, asociación ilícita fiscal y lavado de dinero" a los argentinos Alejandro Burzaco, presidente de Torneos y Competencias S.A, y a Mariano y Hugo Jinkis, dueños de Full Play SA, así como también a esas compañías, informó un comunicado del organismo fiscal.
Sobre los tres argentinos pesan órdenes de detención libradas por la justicia federal de Argentina a raíz de la investigación de la justicia estadounidense por la presunta comisión de sobornos en el ámbito de la FIFA y un pedido de extradición cursado por Estados Unidos. Ambas empresas manejan derechos de televisión y mercadeo deportivo.
"Además, la AFIP solicitó información al exterior para obtener datos de sociedades y cuentas bancarias en Panamá, Uruguay, Estados Unidos y Suiza. También pidió que la justicia embargue los bienes de los contribuyentes investigados", dijo un comunicado del organismo fiscal. La denuncia recayó en el juez argentino Diego García Berro.
Un juez denegó una solicitud de las defensas de los empresarios que pedían eximirlos de prisión. Jorge Anzorreguy, abogado de los Jinkis, dijo a medios de prensa que sus defendidos están en Argentina y que apelarán esa decisión ante un tribunal de segunda instancia.
Anzorreguy, quien dijo desconocer al detalle las imputaciones contra los acusados, afirmó que los Jinkis "tienen todo el derecho de permanecer en libertad" hasta que se resuelva el proceso de extradición.
En tanto, el paradero de Burzaco es desconocido. Su último tuit señalaba el martes que estaba en Londres y se disponía a viajar a Zúrich, donde el miércoles fueron arrestados siete dirigentes de la FIFA, en su mayoría latinoamericanos, por el caso de corrupción y sobornos. Torneos y Competencias, dueña de los derechos de transmisión de distintas ediciones de la Copa América, entre otros certámenes, ha desmentido "cualquier participación de la compañía y de su presidente en los hechos denunciados".
La causa en la que se requiere la detención de los tres acusados está en manos del juez federal Claudio Bonadío.
En el caso de que los imputados se entreguen o sean detenidos, se celebrará una audiencia judicial en la que podrán pronunciarse acerca de si acceden a ponerse a disposición de la justicia de Estados Unidos. En caso de que se nieguen a ello, se abriría un proceso en el que la justicia estadounidense y los acusados deben defender sus posturas y luego un juicio de extradición en Argentina donde se resolverá la cuestión.
Los tres empresarios aparecen implicados en una investigación por el supuesto pago de millonarios sobornos a directivos de la Conmebol y la CONCACAF para la explotación de los derechos de televisión y mercadeo de torneos continentales.
Por otro lado, desde París, el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, criticó a la FIFA al señalar que "nunca colaboró con la transparencia fiscal del fútbol", según el mismo comunicado del organismo.
En ese sentido, Echegaray hizo referencia a una nota del 30 de abril en la que "reiteramos nuestro pedido al presidente de la entidad, Joseph Blatter por la falta de colaboración...ya que, y a pesar de los compromisos asumidos, no le dio a la AFIP la posibilidad de obtener acceso al Registro de Transferencia de Jugadores (TMS)".
Según la AFIP, Blatter se comprometió con Echegaray en 2014 a instrumentar un proceso para que la AFIP pueda obtener información del registro de transferencia de jugadores lo que "hubiera permitido al organismo fiscal obtener información sobre los verdaderos valores de las operaciones de compra venta de futbolistas y restringir las maniobras de evasión de los hombres de negocios del fútbol".