Rafael Zamorano 9y

La NFL todavía tiene una cuenta pendiente con el temido Kevin Greene

La redacción de ESPN.com.mx eligió a los jugadores más representativos para cada número de jersey, desde el 99 hasta el 1, para dar a conocer sus semblanzas a modo de conteo regresivo hasta el arranque de la temporada regular del 2015. Aquí puedes consultar la lista completa.

MÉXICO -- Edificar una carrera con calibre de Salón de la Fama, siempre jugando con la misma franquicia, suele ser un motivo de admiración.

Kevin Greene recorrió el camino contrario.

El ala defensiva/apoyador externo se construyó una carrera que tarde o temprano lo verá ingresar al recinto de Canton Ohio, al tiempo que brilló para cuatro franquicias diferentes, siempre portando el mismo jersey N° 91.

Greene llegó a la NFL como recluta de quinta ronda --la N° 113 global--, procedente de Auburn, para Los Ángeles Rams. Debió ser paciente. Greene no inició un sólo encuentro en sus primeras tres campañas, pese a que culminó su segunda temporada profesional con siete capturas, y su tercera temporada con 6.5.

Para 1988, Greene finalmente recibió la titularidad de tiempo completo, y a partir de allí, empezaron a llover las capturas. Greene fue el segundo mejor cazador de mariscales de campo en ese año, con 16.5 derribos de pasador. Al año siguiente, repitió con otras 16.5, obteniendo su primer viaje al Pro Bowl.

Su estadía con los Rams se caracterizó por formar parte de un equipo sólido en el que también militaban estelares de la talla de los receptores abiertos Henry Ellard y Flipper Anderson, el corredor Greg Bell, el tackle ofensivo Jackie Slater, los esquineros Jerry Gray y Todd Lyght, y el apoyador Roman Phifer, entre otros, pero por coincidir con la época más brillante en la historia de sus rivales divisionales, San Fancisco 49ers. A finales de la década de los '80s y principios de los '90s, lo más lejos que llegaron los Rams fue al Juego de Campeonato de la NFC al término de la temporada de 1989, donde sucumbieron ante los Niners por 30-3.

En 1993, Greene emigró a Pittsburgh, donde ayudaría a forjar un nuevo apodo para una defensiva que tenía poco tiempo de abandonar el esquema 4-3 de Chuck Noll a favor de un sistema 3-4 más agresivo bajo su sucesor, Bill Cowher. Con Greene y Greg Lloyd como apoyadores externos, Chad Brown y Levon Kirkland por dentro, Rod Woodson y Carnell Lake en la secundaria, la unidad defensiva de los Steelers empezó a ser conocida como "Blitzburgh".

El paso de Greene por Pittsburgh fue breve pero productivo. Amasó 35.5 capturas en tres años, incluyendo 14 para liderar a la NFL en ese departamento en 1994. Como miembro de los Steelers, se ganó dos viajes más al Pro Bowl, y fue reconocido por primera ocasión como All-Pro de primer equipo. Pittsburgh calificó a la postemporada en los tres años, y en 1995, culminaron su campaña con un viaje al Super Bowl, único viaje al súper domingo que haría Greene... como jugador. En el Super Bowl XXX, Pittsburgh cayó por 27 ante los Dallas Cowboys, y al año siguiente, Greene ya vestía otros colores.

Para 1996, Greene había firmado con los Carolina Panthers, con quienes tuvo impacto inmediato. En su temporada debut en Charlotte, Greene registró 14.5 capturas para convertirse en el jugador de mayor edad en liderar a la liga en capturas, quedando por delante de su entonces compañero de equipo Lamar Lathon, quien finalizó segundo con 13.5 (empatado con Bruce Smith y Michael McCrary).

Los Panthers, en apenas su segundo año de vida como franquicia, calificaron a la postemporada coronándose en la NFC Oeste, su vieja casa, y alcanzando el Juego de Campeonato de la NFC, donde ya no pudieron superar a los Green Bay Packers en Lambeau Field.

En 1997, Greene emigró a la costa oeste para vestir el uniforme de los 49ers, con quienes se anotó 10.5 capturas. En San Francisco, Greene volvió a ayudar a su equipo a coronarse en la NFC Oeste, y volvió a alcanzar el Juego de Campeonato de la NFC, cayendo por segundo año consecutivo ante los Packers en la antesala del Super Bowl.

Para 1998, Greene estaba de regreso con los Panthers, donde jugó sus últimas dos temporadas profesionales, consiguiendo un total bastante respetable de capturas: 15 en el '98 (que le valieron su quinto y último viaje al Pro Bowl), y 12 en el '99.

Al final, Greene se retiró con 160 capturas de mariscal de campo, suficientes para mantenerlo tercero en la lista de todos los tiempos --únicamente por detrás de Bruce Smith y Reggie White-- y primero entre apoyadores.

Las aportaciones de Greene a las defensivas de la NFL no habían terminado con su retiro, no obstante. En el 2008, Greene cumplió una pasantía como asistente defensivo con los Steelers, quienes se adjudicaron el Super Bowl XLIII frente a los Arizona Cardinals al término de ese año. En el 2009, Greene aceptó la oferta de su antiguo coordinador defensivo y entrenador en jefe, Dom Capers, para hacerse cargo de los apoyadores de los Packers, donde ha fue instrumental en el desarrollo del estelar Clay Matthews. Con Green Bay, el equipo que le negó acceder al Super Bowl dos veces en su carrera como jugador, Greene conquistó el Super Bowl XLV --irónicamente, frente a los Steelers--, su primer campeonato oficial en la NFL, como entrenador de tiempo completo.

En el 2014, Greene anunció que dejaba el juego para pasar más tiempo con su familia.

"Me alejo de la NFL en este momento para pasar más tiempo con mi esposa, Tara, y nuestros hijos, Gavin y Gabrielle”, declaró en su momento Greene. “Extrañaré dirigir e intentaré volver cuando nuestros hijos vayan a la universidad, si algún equipo me acepta".

Queda la impresión de que Greene no ha dado todo lo que puede dar al juego del fútbol americano. De la misma manera, el juego tampoco le ha dado todo lo que le debe a Greene.

Greene ha sido finalista para el Salón de la Fama en las votaciones del 2012, 2013, 2014 y 2015, y se quedó entre los semifinalistas en cada uno de los cinco años previos. Tarde o temprano, los votantes al recinto de los inmortales le harán justicia a uno de los cazadores de mariscales de campo más productivos en la historia del juego.

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