MADRID -- El Atlético de Madrid volverá a tener un ataque de lujo. Jackson Martínez será el ‘9’ de referencia colchonero las próximas cuatro temporadas luego de que el club llegara a un acuerdo con el Porto por su traspaso de acuerdo con reportes de medios españoles y que ascendería por alrededor de 35 millones de euros. El colombiano llega al club para formar una prometedora dupla goleadora con Luciano Vietto, quien de acuerdo con el presidente del Villarreal, Fernando Roig, fue vendido al cuadro rojiblanco por 20 millones de euros.
La llegada de los delanteros sudamericanos fue precedida por la venta de Mario Mandzukic a la Juventus de Turín por 18 millones de euros y anuncian más cambios. Raúl Jiménez, quien no ha logrado adaptarse al futbol español, podría salir cedido para abrir hueco a los recién llegados y, de paso, completar su aclimatación a tierras europeas. En tanto, Antoine Griezmann tiene varias ofertas provenientes de Inglaterra, si bien en el club no están dispuestos a venderlo. Así, compartiría cartel con los flamantes delanteros, quienes tendrían de apoyo a Fernando Torres, Raúl García y Ángel Correa.
Por quinto año consecutivo, el conjunto que dirige Diego Pablo Simeone hará frente a la campaña con una delantera totalmente renovada, algo que hasta hace muy poco el club hacía por necesidad económica, dada su cuantiosa deuda con Hacienda, pero que desde la campaña pasada hace con miras a mantener la competitividad del equipo, cuya meta de asegurar el puesto en Champions League ya es habitual.
Ya sea por urgencia de “vender”, por la imposibilidad de retener a sus jugadores estrella o con el objetivo de mantener el nivel, el ‘Cholo’ Simeone no ha conservado a su delantera titular ni una sola vez desde su llegada al club en diciembre de 2011.
2011-2012. La temporada que salvó el 'Cholo'
Fue la última temporada ‘dramática’ del Atlético de Madrid. En desbandada, se habían marchado el técnico Quique Sánchez Flores, Sergio Agüero, De Gea y Ujfalusi creando un clima de incertidumbre y pesimismo entre la hinchada incluso desde el verano.
Atlético se veía obligado; reforzarse con jugadores de bajo coste o préstamos que en su momento causaban poca ilusión pero que a la postre resultaron unas verdaderas joyas, exceptuando a Radamel Falcao, el único fichaje bomba y por quien el club pagó cerca de 40 millones.
Fue la temporada en que desembarcaron Thibaut Courtois, Gabi y Arda Turan. También llegó Adrián, que había maravillado en el Europeo sub-21.
Diego Costa, que ya figuraba en el plantel, se recuperó de una grave lesión para ir cedido al Rayo sin que nadie lo echara de menos. Pero la temporada resultó convulsa y estuvo a punto de ser un fracaso por lo que en diciembre vio un cambio de mando, el último, pues llegó Simeone a rescatar al equipo que terminó coronándose campeón de la Europa League.
El máximo artillero fue Radamel Falcao, quien marcó 24 tantos en 34 partidos disputados; más del triple que su acompañante por entonces, Adrián, que acabó la campaña con siete tantos en 36 partidos. Aquella fue la última campaña de Diego Forlán, antiguo héroe rojiblanco y que ya contaba con 32 años de edad.
2012-2013 La consagración del ‘Tigre’
El Atlético volvía a las grandes Ligas y se coronaba campeón de Copa del Rey tras vencer al Real Madrid por 2-1 en el Santiago Bernabéu, algo que no había logrado hacer en más de una década. Y aunque quedó eliminado en la Europa League en la segunda ronda, logró acabar tercero en la clasificación y amarrar puesto de Champions para la siguiente temporada.
Volvieron Raúl García y Diego Costa de un año de cesión y junto a Radamel Falcao formaron una temible delantera. El Tigre desplegó todo su poder marcando 34 tantos en 40 encuentros y Costa irrumpió en la escena marcando 20 tantos. En total, el Atlético de Madrid acabó con una cuota de 100 tantos marcados.
Pero el club no pudo retener al ‘Tigre’, quien se había ganado los corazones de su afición, y mucho menos pudo hacer ascos a los 60 millones de euros que el Mónaco pagó por él y que, en su mayoría, fueron a parar a las arcas de Hacienda. En su lugar, Diego Costa, que había empezado a despuntar, se haría cargo de la responsabilidad en ataque acompañado de David Villa, que llegó por módicos cinco millones de euros y con Adrián como suplente.
2013-2014 La campaña histórica del Atlético de Madrid
Campeón de Liga por primera vez en casi 20 años; finalista de la Champions y semifinalista en Copa del Rey. El Atlético de Madrid acabó con 113 tantos marcados, superando su propio récord histórico de 107 tantos logrados en la campaña 96-97; Diego Costa, el máximo artillero, se fue con 36 goles en 51 partidos, mientras Raúl García y David Villa contribuyeron con 17 y 15 tantos, respectivamente.
Pero como había ocurrido con el Tigre, no pudo retener a Diego Costa, que enfiló hacia Londres para integrarse al Chelsea, mientras David Villa puso fin a su carrera europea para probar suerte en Estados Unidos. Las cuentas, esta vez, salieron un poco mejor al Atlético y pudo, finalmente, reforzarse con jugadores de ‘alta gama’.
2014-2015 La reconstrucción
El éxito de la campaña anterior provocó un éxodo de jugadores a equipos de elite en busca de un mejor futuro y por primera vez en muchos años, el Atlético de Madrid gastó 26 millones más de lo que ingresó en concepto de fichajes. Invirtió un total de 95 millones de euros el mercado de verano, con Mario Mandzukic y Antoine Griezmann, los más caros y quienes fungieron como pareja goleadora en la campaña 2014-2015, además de Raúl Jiménez y el esloveno Jan Oblak, el portero más caro en la historia colchonera.
Pero desde que iniciara la campaña, Simeone avisó que su equipo estaba listo para competir “por el tercer lugar”, ya que su “Liga” estaba con “Sevilla y Valencia”, algo que podría parecer impropio para el entonces Campeón de Liga, pero realista teniendo en cuenta la fuerte inversión de los dos grandes, Barcelona y Real Madrid. Simeone entregó los resultados prometidos, no obstante, el ataque formado por Mandzukic y Griezmann tardó en atraer a la hinchada que llevaba años entregándose al centro delantero cual si fuera estandarte; tanto, que en invierno tuvieron que repatriar a una de sus glorias pasadas, Fernando Torres para alimentar la ilusión de la hinchada.
‘El Niño’ no fue el de 2007, Jiménez no terminó de adaptarse a Europa y Mandzukic, aunque tuvo una productiva primera mitad de la campaña, llegó a mayo con tres meses de sequía a las espaldas y un problema en el tobillo -- y al parecer, de comunicación, pues no es secreto que al Cholo no le gusta que el croata no logre hablar en español después de un año. Griezmann, por su parte, tuvo una primera mitad de altibajos pero brilló con luz propia desde enero. Así, el equipo quedó lejos de la cuota del año anterior. Mandzukic, quien ya tiene un pie en la Juventus de Turín, se quedó con 22 tantos marcados en 37 partidos, seguido por Antoine Griezman, con 12 goles en 28 encuentros. En total, el Atlético de Madrid sumó apenas 65 tantos.