BARCELONA -- Héctor Moreno se ha convertido en un problema para el Espanyol. Necesitado de liquidez y convencido de la nula predisposición del jugador a renovar su contrato, el club entiende la necesidad de traspasarle inmediatamente para evitar su marcha con la carta de libertad en junio de 2016.
El central mexicano llega este martes a Barcelona para integrarse en la pretemporada a las órdenes de Sergio González y crece la sensación de incomodidad, por cuanto se considera que Moreno no está ayudando a encontrar una salida que beneficie al club, pendiente tan solo de su futuro particular bajo las directrices de su representante, el inefable Mino Raiola.
Joan Collet, presidente periquito, mostró este lunes durante la presentación del portero italiano Francesco Bardi una imagen de tranquilidad que no se refleja de puertas adentro, donde los ejecutivos saben de los movimientos dirigidos por Raiola, que tiene sobre la mesa más de una propuesta interesante para él. Aunque no para el club blanquiazul.
El tiempo juega en contra de un Espanyol que lleva dos años ‘mareando la perdiz’ con Moreno. Convencido de que el jugador era el mejor patrimonio de su plantilla el club llegó a suspirar con un traspaso por encima de los $10 millones de euros. Y hoy se daría por conforme ingresando la mitad.
Semanas antes de la disputa del Mundial de Brasil el Espanyol mantuvo conversaciones con un club de la Bundesliga, cuyo nombre no llegó a conocerse oficialmente (se especuló con el Wolfsburgo) y que ofreció 7,5 millones de euros que el club rechazó. Exigía por aquel entonces la entidad catalana no menos de 9 millones… Hasta que la grave lesión que sufrió Moreno ante Holanda, en junio de 2014, rompió todas las expectativas.
El Espanyol ofreció durante la pasada primavera la renovación al jugador, en una propuesta que incluía el acuerdo a facilitar su traspaso si llagaba una oferta bien considerada por ambas partes. Pretendía de esta manera el club periquito evitar la urgencia a la que se ha abocado ahora. Es la misma operación que concretó el Barcelona con Pedro, cuyo contrato acababa en 2016 y fue renovado hasta 2019… Para facilitar su traspaso sin urgencias y con buenas perspectivas.
Pero la respuesta de Moreno, por boca de Mino Raiola, fue negativa. El manager italiano trasladó al Espanyol el deseo de ser traspasado este verano y el club lo tomó con lógica. Pero sabiendo, también, que el tiempo ya comenzaba a jugar en su contra.
De acuerdo a lo publicado por el diario Sport, el PSV Eindhoven estaría interesado en el jugador y ofrecería hasta 6 millones de euros por el fichaje, pero el Espanyol no ha recibido ninguna propuesta. “Raiola me comentó que podría haber algo, pero de momento no hay nada” declaró Collet a Mundo Deportivo, añadiendo su deseo de que Moreno permanezca en el club. Palabras de cara a la galería. Tan inciertas como cargadas de urgencia por, precisamente, lo contrario.
Desde Holanda, una fuente cercana al PSV admitió el seguimiento del club, pero enfrió el trato, asegurando que no estaría próximo a cerrarse por esa cifra que se publicó en España. Más aún, desde el entorno del Espanyol se sospecha que Raiola quiera prolongar el asunto lo máximo posible para que la entidad blanquiazul rebaje sus pretensiones.
“Cuanto menos paguen de traspaso, más podrán pagarle de sueldo” conviene una fuente cercana al futbolista refiriéndose a cualquier club interesado en su contratación. En este sentido se ha apuntado tanto a la Fiorentina como al referido del PSV, aunque desde el entorno de Raiola se da por hecho que el manager maneja otras opciones.