Si pensaban que los Azulejos de Toronto habían acabado con sus movimientos luego de haber conseguido en cambio a Troy Tulowitzki, se equivocaron. Toronto logró atrapar una de las piezas más grandes disponibles en el mercado este jueves, al conseguir en cambio al as de los Tigres de Detroit David Price en una transacción de cuatro jugadores.
Contrato al cambio de Tulo, este es un alquiler puro. Price será agente libre luego de esta temporada, y es posible que firme un gran contrato -- $200 millones es una posibilidad - y no hay una oferta calificada que le pueda dar algo de vuelta a Toronto por Price. El traer a Price solo demuestra la intención de los Azulejos de ganar ahora, para un equipo que está hambriento de dejar de ser solo una amenaza y un aguafiestas en septiembre.
Sin otro beneficio de parte de Price que solo tenerlo por los siguientes dos meses, es crucial que un cambio de esta magnitud sea una mejora significativa respecto a lo que el equipo ya tiene y que el equipo está en una posición que esa mejora tenga algún significado. Para una organización como los Diamondbacks o los Atléticos, el añadir a un jugador como Price hubiese sido un gesto futil. Pero para los Azulejos, ese beneficio es muy real.
Es un año de paridad en la Liga Americana, y al llegar a los partidos del jueves, ocho equipos de la Liga Americana que no son líderes de división estaban a cinco juegos de uno de los dos puestos de comodín. Esta aglomeración está llena de equipos ordinarios que rondan la marca de los .500. Los Azulejos tienen una muy buena razón para considerarse los mejores de ese grupo, al tener el mejor diferencial de carreras en la Liga Americana incluso antes de cualquiera de los dos cambios.
Contrario a la pasada ocasión en que fue cambiado, Price desplaza directamente algunos lanzadores con pobre marca. Mientras los Tigres tuvieron muy buenas razones para esperar que fuese un lanzador asombroso, Drew Smyly, quien se fue hacia Tampa en el mismo acuerdo y fue el lanzador que Price reemplazo, ya había lucido sólido en el 2014. El sistema ZiPS le proyecta 1.8 de WAR adicional esta temporada a Price en Toronto, un número que es casi una victoria complete mejor que cualquier otro lanzador en esta rotación. Sobre Félix Doubront, eso es casi una victoria y media.
Una victoria y media quizás no suena como algo grande, pero sí lo es. Hasta el jueves en la mañana, el ZiPS le proyectaba a los Azulejos un 35 por ciento de probabilidades de llegar a los playoffs (8 por ciento de ganar el cetro divisional, 27 por ciento de un puesto de comodín). Con Price en la rotación, los Azulejos saltan a un 49 por ciento de probabilidades de llegar a la postemporada (14 por ciento de ganar la división, 35 por ciento de ganar un comodín).
Atrapar a los Yankees será una tarea difícil, pero como dice el refrán: Para atrapar al equipo que está encima de ti, primero tienes que ser mejor que el equipo encima de tí.
Antes del cambio de Price, el ZiPS tenía a los Yankees como el mejor equipo en la Liga Americana en el resto del camino. Ahora son los Azulejos, ya que se espera que su porcentaje de victorias de .556 en el resto de la temporada los ubique en el segundo puesto en todo el béisbol. Conclusión: Los cambios de Tulo y Price doblan las posibilidades de los Azulejos de llegar a playoffs, las que el ZiPS ubica actualmente en un 25 por ciento sin esos jugadores.
Pero esa mejoría tuvo su costo. Contrario al cambio con los Rockies, en este los Azulejos se desprendieron de uno de sus tres mejores prospectos en Daniel Norris. Otro jugador que se encamina hacia Detroit, Matt Boyd, se perfila mejor que lo que se perfilaba hace un año; su recta mejorada le da una mejor oportunidad de ser un abridor en el medio de una rotación. Y el jugador final que se encamina hacia Detroit, Jairo Labourt, puede llegar hasta las medianas 90 mph, aunque no se ha desarrollado mucho, y no existe garantía de que su comando llegue a progresar.
En cuanto a los Tigres, esto era algo que no se tenía que pensar mucho. Aunque los Tigres están todavía técnicamente en la contienda por el comodín, es un equipo con serios problemas y que no tiene la profundidad en sus fincas para poder resolver los mismos. El ZiPS les otorgaba un 13 por ciento de probabilidades de llegar a los playoffs antes del cambio de Price, y ahora las mismas han bajado a un 6 por ciento.
Para ponerlo de otra forma, el ZiPS estima que en el 93 por ciento del tiempo, la presencia de David Price en los Tigres no sería la diferencia entre llegar o no a la postemporada. Dados los problemas de la organización y su necesidad de reformarse para una última corrida, el recibir solo el turno en el sorteo por Price era una elección inferior que tener lanzadores que son prospectos ahora, y que fuesen unos que ellos podrían elegir quedarse con ellos o cambiarlos en el invierno.
Una de las metas en el poker es conseguir tus fichas en el pote detrás de tus mejores manos. Los Azulejos tienen ahora un equipo más fuerte que cualquier otra edición desde los últimos equipos que llegaron a la postemporada en Toronto, los campeones de la Serie Mundial de 1993. Eso es lo que Toronto hizo. Ver una oportunidad y aprovecharse de ella en el momento justo es lo que hacen las buenas organizaciones. Los grandes cambios de Toronto no garantizan que los Azulejos vayan a ganar la Serie Mundial o que vayan a ganar los playoffs. Pero no vale la pena luchar por algo que esté garantizado, y el no intentarlo es peor que fallar. Y estos Azulejos están en plena batalla..