BARCELONA -- El PSV Eindhoven quiere a Héctor Moreno, pero el acuerdo que tiene perfilado con su representante contempla un traspaso de seis millones de euros para de esta manera poder cumplir lo pactado con su salario. Y a medida que pasan los días, el futbolista azteca va convirtiéndose en un conflicto para el Espanyol.
Mino Raiola, manager del central mexicano, conversó en los últimos meses con clubs de la Premier y la Serie A, encontrando buena predisposición deportiva pero en absoluto económica, puesto que si el Espanyol exigía un traspaso por encima de los siete millones resultaba imposible pagarle el sueldo presentado por el representado: por encima de 1,5 millones.
Tottenham y Fiorentina apuntaron como los clubs mejor posicionados en el fichaje de Moreno, pero finalmente se echaron atrás (o al menos lo han hecho de momento), dejando al campeón de la Eredivisie como principal y único aspirante a la contratación del jugador, que se sumó a la pretemporada en los amistosos frente a Reading y Southampton, por mucho que Sergio González, entrenador periquito, tiene plena constancia de que el club trabaja en su traspaso.
Un año y medio después de rechazar ofertas por encima de los 8.5 millones de euros (el Zenit ruso llegó a presentarle al jugador un contrato), el Espanyol se encuentra con un verdadero problema. Fuentes cercanas a Eduardo Hernández, su representante hasta la entrada en escena de Raiola, confirmaron que tanto en el verano de 2013 como en enero de 2014 “existieron ofertas muy buenas para el club”, algo que ahora ha cambiado absolutamente.
Moreno acaba contrato el 30 de junio de 2016 y Raiola ya le ha trasladado que en caso de no llegar a un acuerdo final con el PSV, a partir de enero su valoración aumentará de forma significativa puesto que podrá empezar a negociar libremente con cualquier club. Para ello se entiende necesario que el central se convierta nuevamente en la clave de la defensa periquita, en un curso que se adivina complicado en el Espanyol tras diversos movimientos que han debilitado ostensiblemente la plantilla.
El PSV estrena el sábado su defensa como campeón de la Eredivisie en La Haya y es una certeza que el zaguero mexicano no estará en ese partido, aunque Phillip Cocu está dispuesto a esperar hasta el cierre del mercado.
La urgencia empieza a hacerse presente en el Espanyol, consciente de encontrarse en un momento definitivo para intentar sacar un provecho económico de Héctor Moreno. Y aunque mantiene su exigencia por encima de los siete millones de euros para acceder al traspaso, existe la sensación de que estará condenado a rebajar ese precio.