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Floyd vs Berto: "Más de lo mismo"

Con poco más de un mes de antelación, se confirma lo que ya todos esperábamos que se confirmara, el combate de Floyd Mayweather contra el haitiano Andre Berto para el 12 de septiembre. Será la histórica batalla donde Floyd, de ganar, alcanzaría el record de Rocky Marciano; 49-0 Y la primera reacción al anuncio, es la certeza de que Floyd tal como lo ha planificado, logrará llegar invicto a las 49 peleas y si no se retira del boxeo activo, conseguirá llegar a donde se lo proponga. Eligiendo los rivales que desea enfrentar, sería un accidente que no lo lograra.

Su rival, Andre Berto, es actualmente el campeón interino del peso welter, detalle que presumiblemente le otorgaría algún derecho a figurar entre los posibles oponentes de Floyd. Al menos, alguien a la hora de justificar lo imposible, dirá que es un duelo para “definir al mejor” o una pelea “entre campeones”.

Y la realidad es que Berto no reúne las credenciales necesarias para una pelea contra el mejor libra por libra ni tampoco es el rival en el que alguien pensaría como oponente serio para Floyd. Berto es el mismo que perdió ante Victor Ortiz y Robert Guerrero, ambos derrotados por Floyd. Y si vamos a lo boxístico, tampoco el haitiano tiene herramientas apropiadas para inquietar la segura victoria de Mayweather. Su estilo frontal, sin la velocidad adecuada, de golpeo anunciado o sin el movimiento de piernas requerido en alguien que tendrá que moverse mucho y cortar el ring, antes de pensar en llegarle con algún golpe de poder a Floyd.

Por si fuera poco, lo que en algún momento se especuló que sería un combate ofrecido por televisión abierta, terminará una vez más siendo comercializado por el sistema de PPV. Si recordamos las reacciones de los fanáticos en las redes sociales luego de padecer frente a la pantalla presenciando el “combate del siglo” entre el mismo Floyd y Paquiao, no vemos por donde será encarada la campaña promocional de esta nueva salida al ring de Mister Money.

La duda, mi pregunta es: ¿alcanza con el nombre de Floyd para convencer a los fanáticos a que compren una pelea que promete ser tan aburrida como la anterior? Es difícil predecirlo, pero hasta hoy Mayweather nos ha enseñado que su capacidad de convocatoria está por encima de cualquier duda, sin importar el rival de turno. ¿Por cuál razón esta vez tendría que ser diferente?

Todo puede ocurrir, no obstante hay otros factores que van, seguramente, a conspirar contra el éxito de la cartelera que encabezarán Mayweather y Berto. Además del lastre que carga Floyd en sus espaldas tras el fracaso de su pelea contra Manny, la pelea transcurrirá en medio del fuego cruzado promocional de dos peleas que se realizarán en octubre y noviembre, y que los fanáticos aguardan con mayor expectativa. Me refiero a Golovkin-Lemieux y Cotto-Canelo.

Esas batallas también se verán por el sistema de PPV y quienes planifican sus gastos cuidando los excesos, seguramente tendrán en cuenta ese factor, a la hora de pensar en comprar o no comprar el Floyd vs. Berto. Por otra parte, las pocas semanas que faltan para el 12 de septiembre pueden ser perjudiciales, ya que el tiempo parece escaso para darle la debida promoción y por si fuera poco, nadie olvida las palabras proféticas de Floyd Mayweather Sr. que reclamó que su hijo, en septiembre enfrentara a “un rival fácil”.

Si Berto es ese rival “fácil”, no lo sabemos, pero su presencia en el ring no nació de las estadísticas, no nació de sus merecimientos, no nació de los rivales que enfrentó o venció. Su presencia en el ring, nació de la exclusiva voluntad de Floyd Mayweather. Él lo eligió y por una cuestión de sentido común, un aspirante a entrar a la historia por su récord inmaculado “no creo que escoja un rival para que lo venza, cuando está a punto de alcanzar esa meta”.

En principio, la nueva pelea de Floyd, parece más de lo mismo. Andre Berto es la otra cara del show, pero que nadie se asombre por lo escrito. Esta columna, también es más de lo mismo. Cuando se trata de Floyd, los conceptos son iguales, así como son iguales sus peleas entre si y también son iguales sus resultados.