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Los Jets parecen listos para dejar atrás la era del mariscal Geno Smith

Bastaron 48 horas para que el compromiso de la ofensiva y el vestidor se volcara sobre Fitzpatrick. AP Photo

DETROIT -- ¿Geno, quién?

Tras 48 horas de controversia intensa, los New York Jets regresaron al trabajo este jueves por la noche en un juego de pretemporada. No jugaron particularmente bien, perdiendo 23-3, pero el marcador no importó. Fue su primera oportunidad para jugar con Ryan Fitzpatrick, su nuevo mariscal de campo, y se obtuvo la impresión distinguida en el vestidor que los Jets ya superaron el capítulo Geno Smith. Y no se derramaron lágrimas.

La credibilidad de Smith entre sus compañeros recibió un duro golpe (no es sátira) este martes, cuando el su ahora ex compañero IK Enemkpali le conectó un puñetazo en la mandíbula. Fracasando en reconocer su rol como líder del equipo, Smith se insertó en una situación errónea al discutir con Enemkpali por 600 dólares. Nadie merece una quijada fracturada, pero su papel en un altercado "muy infatil" (las palabras de Todd Bowles) lanza un reflejo pobre sobre el mariscal.

Smith, recuperándose de cirugía, puede estar sentenciado a la banca de los Jets. Ahora es el equipo de Fitzpatrick.

"Él cree en nosotros y nosotros en él", sostuvo el guardia Willie Colon. "Es una onda suave, si me permiten".

No hubo manifestación de emociones por Smith. Parte de ello puede atribuirse a la mentalidad del "siguiente en fila" llevada en la NFL. También se puede entender porque ya querían dejar atrás a Smith. No es nada personal, sólo negocios.

Como ejemplo sirve Brandon Marshall. Durante meses, le dijo a todos que la razón por la cual quiso ser canjeado a los Jets era que le gustaba la idea de jugar con Smith, a quien describió como un mariscal de campo joven y en ascenso. Este fue Marshall después del partido:

"Simplemente sigo avanzando. Pienso que todo el equipo va hacia el frente. Pienso que escucharán ecos de lo mismo a lo largo de este vestidor. Es momento de avanzar y jugar fútbol americano".

Fitzpatrick, de 32 años e iniciando para su 6° equipo, nunca fue el gran heredero para nadie. Y en esta etapa de su carrera, ciertamente no lo será, pero se mostró "frío, calmado y ecuánime", de acuerdo con Bowles, quien está en su debut como entrenador en jefe. Los jugadores hablaron sobre la motivación de Fitzpatrick. Hablaron de la forma clara con la que habló en la reunión previa a las jugadas. No se desconcertó pese a tener sólo un día de entrenamiento con la ofensiva de primera línea. Es un profesional. Ha madurado en las reuniones.

"Pienso que todos alrededor de la liga saben que él es una persona realmente inteligente y todos lo pudimos ver", afirmó Marshall.

Fitzpatrick lanzó apenas tres pases en una serie (10 jugadas) y completó dos. Le faltó fuerza en un pase de tercera y 1, lo que permitió al defensivo romperlo. No tiene un rifle por brazo, pero parte de ello podría ser la energía. Se perdió gran parte de la temporada baja, recuperándose de una pierna fracturada, por lo cual su cuerpo bajo no está totalmente fortalecido y eso podría afectar su mecánica.

Se trató del primer paso pequeño rumbo a la preparación íntegra de Fitzpatrick para la temporada regular. Sin dudas, lo protegieron mejor de lo que Smith a sí mismo en el vestidor.

Los Jets no iban a dejar que algún apoyador molesto se acercara a su nuevo mariscal de campo.