Jordi Blanco | Corresponsal 9y

Cumplen los 'secundarios' del Barça

BARCELONA -- Ausente Neymar se alineó Rafinha; lesionado Alves acudió Sergi Roberto. Y si el centrocampista reconvertido a delantero pasó de puntillas por San Mamés, el medio recolocado como lateral redondeó un partido enorme y se convirtió en uno de los mejores futbolistas del Barça en Bilbao.

El campeón comienza la temporada muy justo de fuerzas y más aún de efectivos. A la espera de conocer el alcance de la lesión de Alves y, en menor medida, la de Busquets, Piqué permanecerá a la sombra durante algunas semanas más y se confía en el regreso de Neymar el próximo sábado... Pero cada dolor físico duele de manera especial.

Y entre todo ello se entiende que es el momento de los secundarios, de los jugadores llamados a permanecer en un segundo plano para apoyar el cabalgar del equipo. Así lo mostró Vermaelen, acompañante de Mascherano en el centro de la zaga y que completó un más que correcto partido, aunque no a la altura de la fantástica actuación de Iniesta, un líder mayúsculo en el césped.

Claro que por encima de todo emergió la figura de Sergi Roberto, puesto en cuestión no pocas veces en los últimos tiempos y empujado al lateral de improviso por la lesión de Alves. Y si durante la pretemporada mostró calidad para sustituir al brasileño, en el primer partido de Liga dejó claro que se puede contar con él.

Guardó su posición con acierto y subió la banda con peligro; se asoció, centró y hasta lanzó un excelente disparo al travesaño, mostrándose como un carrilero de primer orden. Probablemente la mejor noticia, al margen de la victoria, en clave azulgrana.

MESSI ES HUMANO El Barça del tridente comenzó la temporada con sus estrellas apartadas del plano, más allá del excelente remate de Luis Suárez. Cansado, Messi apareció en cuentagotas, atrasado en ocasiones, en la recta final del partido llevó a cabo una excepcional jugada personal que no supo rematar con acierto para lograr el 0-2.

Sin duda, el penalti que falló en la primera mitad pesó en el ánimo del argentino, que no brilló como acostumbra y apenas fue un acompañante en el estreno del campeón, más ocupado en ganar que en brillar, más centrado en comenzar la defensa del título con una victoria, como en las seis temporadas precedentes.

Indiscutible líder del campeón e innegociable lanzador de penaltis en los últimos cinco años, Messi tiene un evidente problema con esta jugada máxima, puesto que de 63 que ha ejecutado con el Barcelona ya ha fallado 14, 22 por ciento del total y que si en este estreno liguero acabó por no pesar, en el pasado ya lo hizo alguna vez... En una eliminatoria frente al Chelsea imposible de olvidar.

Leo es para lo bueno, casi todo, y lo malo, casi nada. Imposible discutir su papel y ridículo ponerle en cuestión, el crack azulgrana acompañó la victoria y, por una vez, no la condujo.

El equipo azulgrana recibirá al Málaga el próximo sábado y después recibirá Luis Enrique con los brazos abiertos el descanso por las selecciones que, aunque se sabe que vaciará el vestuario del Barça, dará un respiro en la urgente puesta a punto.

Pero, por encima de todo, si algo quedó claro en San Mamés para el Barcelona es que además de los cracks, los secundarios están llamados a tener un protagonismo destacado. Por lo menos hasta que en enero entren en acción Arda Turan y Aleix Vidal.

^ Al Inicio ^