Alejandro Pérez 9y

Argentina construye pero compite

BUENOS AIRES - La historia reciente le demanda al básquetbol argentino estar en los Juegos Olímpicos de 2016, como sucedió en las últimas tres ediciones. Pero al mismo tiempo la actualidad de su selección es bastante diferente a los años en los que la Generación Dorada le hizo disfrutar de la gloria. Ese tiempo ya es un lujoso recuerdo. Lo mismo que la propia Generación Dorada.

Los argentinos habían perdido la incómoda sensación de incertidumbre por la obtención de una plaza clasificatoria. Hoy están para luchar, dentro de un nutrido grupo de aspirantes, por los dos pasajes para Río de Janeiro. Y solo se quedarán con uno de ellos si mantienen un rendimiento elevado. Apenas un poco menos que eso, los pondrá en aprietos.

Argentina tiene un plantel con un claro desnivel de jerarquía, experiencia y rendimiento entre Luis Scola y Andrés Nocioni, sus dos principales figuras, y el resto. Que los jóvenes den un paso al frente para achicar esa brecha es una obligación para aumentar su fortaleza y sus posibilidades. También, porque ambos jugadores tienen 35 años, y no existe competencia de selecciones más desgastante que el Torneo de las Américas, con 10 partidos en 12 días para los que lleguen a la final.

¿Qué tiene a favor esta Argentina para confiar en llegar al partido decisivo? Por encima de todo, un jugador determinante como Scola. En tres de los últimos cuatro torneos continentales clasificatorios se encargó de comandar al equipo a alcanzar buenos resultados. Un líder positivo, que esta vez tendrá un acompañamiento de calidad en Nocioni. También cuenta con un juego de conjunto confiable.

Aunque con los nuevos integrantes aún está en etapa de acople, todos sus hombres ponen por delante al equipo, lo que no es poco en este continente. Con cualquier resultado Argentina lucirá mayormente un juego ordenado, de pases y con buena selección de tiros. Esto está relacionado a otro punto positivo: suelen mantener el foco de su objetivo, no pierden la concentración a lo largo del torneo. Otra virtud que no abunda en la región.

Además, se le puede reconocer a un equipo ampliamente joven (24,2 años de promedio), que mostró carácter y poder de reacción ante situaciones de desventaja. Tal vez, deba recurrir a ellos con frecuencia.

¿Qué cosas le juegan en contra al equipo argentino? Entre sus carencias Argentina sufre con la falta de un juego interior poderoso. Suena extraño escribir esto, estando ahí Scola. Es que, cuando el capitán cada vez aleja más su juego del cesto en la NBA, en su selección se ve obligado a acercarlo, debido a la carencia de un hombre con presencia física en la pintura.

A favor de los argentinos jugará que los rivales tampoco lucen hombres interiores desequilibrantes. A diferencia de otras épocas tampoco cuenta con hombres con actitud y capacidad física para desplegar una defensa agresiva.

Es cierto que el equipo tiene disciplina para defender, pero la despliega con intensidad intermitentemente. Si quiere lograr una plaza olímpica debe alcanzar un buen rendimiento defensivo. En eso no tiene alternativas.

Otro aspecto que padece esta Argentina es que no le sobran opciones ofensivas. Fuera de Scola y Nocioni no encuentra muchas otras variantes. Para peor, tampoco cuenta con hombres que puedan desequilibrar en el uno contra uno, cuando los sistemas no fluyen. Por eso, el regreso del lesionado Campazzo, por su característica de penetrar y descargar, es imprescindible.

Tampoco mostraron los argentinos tiradores consistentes a distancia. Para eso están Safar, Brussino y Mainoldi, pero todavía no aportaron lo que Scola necesita: que a fuerza de triples extiendan las defensas rivales para que él tenga espacios en la pintura. Esta es otra Argentina. Apenas con dos mitos sagrados, como Scola y Nocioni, y un grupo de jugadores correctos, aunque todavía con mucho por demostrar en el ámbito internacional. Pero cuidado, porque siete de los jugadores argentinos cuentan con menos de 25 años (5 con menos de 23).

Más allá de acumular un puñado de méritos para luchar por la clasificación directa a los Juegos Olímpicos, este equipo está construido también para pelear a futuro.

^ Al Inicio ^