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Djokovic, letal; Nadal pasó un debut con exigencias y cayó Nishikori

NUEVA YORK -- US Open en marcha, Novak Djokovic en llamas. En la primera jornada del Abierto de los Estados Unidos, el N°1 del mundo no perdió tiempo ante Joao Souza (91°) y se impuso por triple 6-1 en solo una hora y 10 minutos. Con mayor exigencia, Rafael Nadal (8°) desarticuló un duro emparejamiento ante el joven Borna Coric (33°) y prevaleció en cuatro sets. La contracara: derrota de Kei Nishikori (4°), finalista en 2014.

Djokovic tuvo un partido sin fisuras, con siete quiebres en diez chances y solo ocho puntos cedidos con el servicio en todo el encuentro. Como para lavar la cara rápidamente después de una semana con obstáculos en Cincinnati y una derrota final ante Roger Federer que lo privó de hacer historia en los Masters 1000.

"Lo que importa es entender lo que hice mal, lo que sucedió en esos partidos y analizarlos; hablar con mi equipo, con mi entrenador, y tratar de encontrar el enfoque correcto para prepararme y mejorar", decía el serbio antes del debut. Primer paso: cumplido.

En segunda ronda, se verá con el austríaco Andreas Haider-Maurer (52°), que frustró el avance del canadiense Vasek Pospisil (45°).

En la sesión nocturna, Nadal mostró de a ratos una de sus mejores versiones de la temporada en canchas duras, para detener por 6-3, 6-2, 4-6 y 6-4 la amenaza de un Coric que ya lo había vencido en Basilea, 12 meses atrás.

Tramo de 12-0 en puntos para desnivelar un primer set parejo hasta 3-3 y dominio pleno en el segundo, el paso de apertura del español, sumamente superior en el comienzo.

En el tercero, el croata levantó su nivel, afinó los impactos con el drive y Nadal empezó a mostrar algunas inconsistencias al servicio (hasta allí no había sufrido siquiera chances de quiebre en contra), incluidas sus tres primeras doble faltas del encuentro.

Con nueva oportunidad desde la devolución en 5-4, Coric llevó las cosas a un cuarto set y lo que minutos atrás parecía encaminarse a un festejo en sets corridos del mallorquín pronto reabrió su libreto en Flushing Meadows.

Pero en la cuarta manga reapareció la mejor forma de Nadal en la noche neoyorquina, desorbitando de contragolpe a su rival y sorprendiendo en 3-3 con una devolución decisiva unos cuantos pasos adentro de la cancha, a lo Federer en Cincinnati. Ya no habría vuelta atrás en el marcador.

Campeón aquí en 2010 y 2013, Nadal retoma impulso en medio una gira desdibujada, sin pasar de cuartos en los Masters 1000 de la gira previa. Proyectando el cuadro, en cuartos podría haber un reencuentro con Djokovic. Por lo pronto, en la próxima rueda ya lo esperaba el argentino Diego Schwartzman (74°), tras un muy buen triunfo sobre Elias Ymer (144°), otra promesa de la camada 96.

Como nota sobresaliente de la jornada, además, una gran sorpresa: derrota en cinco sets de Kei Nishikori ante Benoit Paire (41º). El francés, que llegaba con envión tras una buena semana en Cincinnati, levantó dos match points para dejar en el camino al último finalista.

En otros partidos, festejo del campeón defensor, Marin Cilic, y regreso con éxito para David Ferrer, marginado desde la gira de pasto. La curiosidad: seis retiros en el día en el cuadro masculino, uno de ellos a cargo de Gael Monfils, ahora sin entrenador y en el ojo de la tormenta semanas atrás.


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