CARSON -- Nos despedimos en el aeropuerto de Ezeiza, el domingo por la noche, por una cuestión sencilla: diferentes vuelos. No fue un domingo más, puesto que Lucas Martín Matthysse estaba cumpliendo 33 años… El lunes al mediodía, el argentino ya estaba en el Double Tree Hilton de Carson, California, para su pelea con Víktor Postol. Pelea que marcará un momento definitorio para ambos, teniendo en cuenta que se pondrá en juego la corona welter junior, vacante, del Consejo Mundial.
El argentino llega al combate con una marca de 41 peleas, de las que gano 37 y perdió 3, con una sin decisión y 34 nocauts a favor, lo que le da un 83% de efectividad. Postol, a su vez, está invicto en 27 peleas: las gano todas y definió el 41% de sus combates antes del límite: 11 encuentros. Lucas tiene 33, y Postol, nacido en Ucrania, 31. En el tema de los números hay un detalle que no se puede dejar de mencionar: mientras “La Máquina” mide 1,69m, “El Hombre de Hielo” tiene 1,80. Detalle que será una de las claves de la pelea.
De eso nos ocuparemos a lo largo de la semana, que oficialmente comenzará el miércoles 30 de septiembre, con un entrenamiento público en The Rock Gym, en el Torrance Boulevard: el argentino está programado para las 12.30.
Mientras se afirma que Freddie Roach no deja ingresar a nadie a los entrenamientos de Postol en su gimnasio de Los Ángeles, Matthysse hizo un largo entrenamiento público para periodistas en Junín, en donde reside.
La conferencia de prensa final está anunciada para el jueves 1ro de octubre en el StubHub Center –en donde se efectuará el combate- a las dos de la tarde, mientras que el pesaje, en el mismo lugar, será el viernes 2 de octubre a las doce del mediodía. Para tener en cuenta –aunque no sea ninguna novedad- es que el calor se hace sentir mucho en California, con temperaturas que suelen superar los 30 grados.
El programa de HBO –Boxing After Dark- comenzará el alrededor de la medianoche, hora en la Argentina. Para toda Latinoamérica transmitirá Space, con los comentarios de Juan Larena.
Detrás queda un mundo de especulaciones en torno a una pelea que, en la teoría parece difícil para ambos. En el caso de Lucas, porque Postol planteará un combate sin fricciones –o tratará de hacerlo, se entiende- planteado en la larga distancia, obligando al argentino a ser el que lleve las acciones. Pero, a su vez, Postol nunca peleó con un rival de la jerarquía técnica y la experiencia de Matthysse, sin contar con su tremenda pegada: ¿Cuál será el límite de resistencia de Postol, en lo físico y también en lo anímico, ante la adversidad?
Matthysse demostró frente a John Molina, justamente en Carson, que a pesar de sufrir dos caídas y algún corte, también fue capaz de definir la pelea de una manera tan espectacular, que fue considerado El Combate del Año.
Todo está en marcha, se cumplirán las formalidades de las conferencias de prensa, del pesaje y de todo aquello que conforma un espectáculo de boxeo. Detrás del ceremonial y de los compromisos formales, el mundo del pugilismo se prepara, porque todo indica que será una pelea a fondo, para disfrutarla entre dos hombres, dos estilos, dos mentalidades y un objetivo común, transparente y emocionante: un campeonato mundial.